Agricultura campesina y prácticas tradicionales

Milpa comunal en tiempos de pandemia

Mientras el sistema alimentario global de las agroindustrias provoca desastres, pandemias, guerras, hambrunas y enfermedades en la humanidad, esparciendo millones de litros de venenos sobre la tierra y la naturaleza, matando animales, insectos, plantas y humanxs en una guerra no declarada contra lo vivo, en nombre de la plusvalía y la ganancia de algunas grandes empresas transnacionales que controlan semillas transgénicas fabricadas en laboratorios y otros agrotóxicos que han transformado grandes extensiones del campo en desiertos. La pandemia nos hace ver que perdimos nuestra capacidad de producir nuestros alimentos, que perdimos el respeto a la naturaleza, la agroindustria deshumaniza el campo y el capital deshumanizó nuestra relación con la tierra y el territorio.

Milpa comunal en tiempos de pandemia

Imbabura fortalece la agricultura campesina

Admirar, conocer, comprar e intercambiar la riqueza de los pueblos como son las semillas ancestrales fue el objetivo de la “Feria de exposición e intercambio de semillas ancestrales Coya Raymi 2020” que se realizó con la participación de 14 organizaciones de agricultores que representan alrededor del 6.00 familias.

Imbabura fortalece la agricultura campesina

Desde la milpa se mira el mundo entero —dieciocho años después—
SEGUNDA PARTE

"Para que siga viva la resistencia de los campesinos es indispensable defender el maíz, la milpa. Las siembras propias, de autonomía alimentaria, con semillas propias. Sólo con maíz propio, nativo (no su desfigurada versión transgénica), sembrado para que coma la comunidad dependiendo lo menos posible, se puede defender el agua, el bosque, los recursos naturales, sus saberes agrícolas y medicinales, la justicia, los derechos, el ámbito del nosotros".

Desde la milpa se mira el mundo entero —dieciocho años después—

Palabras en torno a las agriCulturas

Es necesario revisar unas cuantas palabras en torno a las agriCulturas, a partir de debates recientes de la sociedad. Se trata de reflexiones abiertas sobre palabras que escuchamos y usamos, y están escritas en modo “pensar en voz alta” y en colectivo.

Palabras en torno a las agriCulturas

A la raíz del verdadero campo

“Este modelo gana si enferma o empobrece”, afirma Jeremías Chauque, uno de los integrantes de la organización campesina Desvío a la Raíz-Agricultura Ancestral.

A la raíz del verdadero campo

Foto del sitio: Revista Mercados
Comunicado de prensa conjunto sobre el Consejo de Comercio informal de la UE, 20/21 de septiembre

En una declaración conjunta de los agricultores y agricultoras europeos, 42 organizaciones de agricultores y agricultoras en 14 países -Austria, Bélgica, Croacia, Dinamarca, España, Francia, Alemania, Italia, Lituania, Luxemburgo, los Países Bajos, Noruega, Portugal y Suiza- junto con las organizaciones centrales Coordinadora Europea Via Campesina (ECVC), European Milk Board (EBM) y Biodynamic Federation – Demeter International piden a sus respectivos gobiernos que rechacen el Acuerdo UE-Mercosur.

Lxs agricultorxs familiares europeos piden que se rechace el Acuerdo UE-Mercosur

Foto: Pedro Ramos

Desde el mes de abril en la ciudad de la Plata y bajo el contexto de pandemia, nace “La Justa”, una comercializadora universitaria de alimentos y otros productos de la economía social y solidaria, la agricultura familiar y la producción local, que en red con organizaciones sociales, comunitarias, políticas y culturales, realizan una intermediación solidaria entre las familias productoras de la región y lxs consumidorxs.

“Justa” y necesaria, la intermediación solidaria que vino para quedarse

- Foto de José González.

La cordobesa María Sánchez Rodríguez (en Twitter,  @MariaMercromina) es veterinaria de campo, poeta, narradora, feminista. En libros como Tierra de mujeres y Cuaderno de campo despliega el amor por la tierra, la valorización de los saberes y haceres de las mujeres rurales, la necesidad de una narrativa que nos proteja del olvido que pareciera imponer la ley del valor capitalista, que todo lo reduce a cálculos de costes y beneficios. María nos trae no ya conocimientos rurales olvidados por los urbanitas, sino la memoria de nuestro linaje. Porque, aunque ya no sepamos ni de dónde vienen los alimentos que consumimos, no hay que ir más allá de una o dos generaciones para encontrarnos con nuestros abuelos pastores, nuestras abuelas agricultoras, nuestras tías jornaleras. Y esa memoria nos brinda una hoja de ruta para comenzar a conciliar campo y ciudad; o, en otras palabras, para entender los límites que impone la ciclicidad de la vida, en los que debe incardinarse la actividad económica.

Entrevista a María Sánchez: “Debemos comprender la relación entre territorio, persona, animal y semilla”