Están desembarcando en España seres humanos de traje, corbata y maletín procedentes de Argentina, México, Uruguay y Brasil. Llegan a los mejores hoteles, dejan el equipaje, se afeitan, perfuman y salen raudos hacia los ministerios. Sus tarjetas de presentación indican que son ejecutivos de empresas soyeras, terratenientes con muchas hectáreas ociosas o responsables de la administración agrícola de su país