Las negociaciones de la Cumbre del Clima en Egipto, ya en la recta final, se están viendo bloqueadas por los fuertes grupos de presión de los combustibles fósiles. Denunciamos que, mientras los países tendrían que estar tomando decisiones de calado para limitar las emisiones de CO2, los acuerdos siguen en el aire sin contemplar los principios de justicia climática y sin repartir responsabilidades en su deuda con los países del Sur Global.