Cuentan nuestros más antiguos que los primeros dioses, los que nacieron el mundo, lo habían hecho casi cabal. Con eso querían decir que lo hicieron casi parejo, no había quien estaba arriba y quien abajo, la tierra no tenía propiedad, no tenía quien la mandara, ni papel que la dividiera ni dinero que la corrompiera. Y cuentan nuestros más antiguos que esos dioses primeros hicieron también a los primeros hombres y mujeres, los hombres y mujeres del maíz, y que desde entonces el maíz fue sagrado para estos hombres y mujeres, los primeros que poblaron estas tierras