Fueron comunidades y organizaciones de toda la región del Ñuble las que llegaron hasta Chillán este lunes y, en específico, a las oficinas de la Dirección General de Aguas de la capital regional. ¿El motivo? Impedir el remate de derechos de aprovechamiento de uso no consuntivo sobre aguas superficiales y corrientes del Río El Cangrejo o Infiernillo, ubicado en la provincia de Diguillín de la citada región.