“La minga no termina aquí, la minga continua con su llamado, despertando conciencias y unificando esfuerzos, compartiendo los dolores, caminando la palabra sin mirar fronteras ni limites, pues la esperanza de vida trasciende a todos los espacios, y todas y todos somos responsables de cuidar y crecer esta criatura que hoy acaba de nacer”. Afirmó Ezequiel Vitonás, líder indígena, quien presentó a la minga el plan de trabajo para continuar caminado la palabra.Las voces de resistencia y dignidad resonaron una y otra vez en la plaza de Bolívar, los casi 40.000 participantes de la minga no cesaban de aplaudir y gritas vivas. Unos, los caminantes de la palabra, satisfechos por la labor cumplida y los invitados de la capital, emocionados y ansiosos al escuchar el mensaje de esperanza que la minga camino hasta la plaza de Bolívar.