En la foto vemos a gente que recorre la línea fronteriza buscando el paso, el transporte, la conexión, el refugio, el escondite. Un breve espacio del tiempo, como cantan por la radio, que se cuela aquí y allá y marca el pulso de acontecimientos fuera de su relación inmediata. De algún modo huyen, huyen hacia adelante. Su exilio, su viaje, su emigración, son un confrontarse con el futuro pero ya, ahora, porque su pasado (por más reciente que sea) es insufrible.