UAWC Palestina: al menos 23 niñxs del norte de la Franja de Gaza han muerto por desnutrición y deshidratación en las últimas semanas
El martes 18 de marzo de 2025, la ocupación israelí reanudó su guerra genocida contra Gaza y rompió el acuerdo de alto el fuego, desatando una brutal oleada de ataques aéreos que ha masacrado a más de 50.144 palestinxs y herido al menos a 113.704 desde que comenzó el conflicto hace 536 días (a 25 de marzo de 2025, fuente: OCHA). ( Lea la declaración completa de la Vía Campesina aquí)
La ocupación israelí utilizando el hambre como genocidio
(24 de marzo de 2025) Durante tres semanas, desde el 2 de marzo, la ocupación israelí ha bloqueado la entrada de todos los alimentos, agua, suministros médicos y cualquier tipo de ayuda humanitaria en la Franja de Gaza. Esto no se debe a la falta de alimentos disponibles; los convoyes de ayuda y los suministros esperan justo fuera de las fronteras de Gaza. La ocupación israelí está matando de hambre a lxs palestinxs de Gaza como continuación de su campaña deliberada diseñada para hacer imposible la supervivencia.
El hambre se agrava rápidamente y la desnutrición alcanza niveles catastróficos. La distribución de alimentos casi se ha detenido a medida que disminuyen los suministros, lo que ha obligado a panaderías y cocinas comunitarias -que han sido el salvavidas y la principal fuente de alimentos para la población de Gaza durante el genocidio- a reducir drásticamente sus operaciones o a cerrar por completo. Más de uno de cada tres niñxs menores de dos años del norte de Gaza sufre desnutrición aguda, y UNICEF ha informado de que al menos 23 niñxs del norte de la Franja de Gaza han muerto por desnutrición y deshidratación en las últimas semanas. El sistema sanitario se ha colapsado, dejando sin tratamiento las enfermedades relacionadas con la inanición, mientras las familias desesperadas recurren a comer forraje animal y beber agua contaminada. La oficina de prensa del gobierno de Gaza anunció que Gaza ha entrado en la primera fase de la hambruna.

Sin una intervención inmediata, se producirá una muerte masiva
Sin embargo, UAWC subraya que ésta es la intención de la ocupación: se trata de una política calculada de inanición destinada a borrar a los palestinos de su tierra. Los ataques aéreos israelíes han arrasado las tierras de cultivo, el sector pesquero y las instalaciones de almacenamiento de alimentos de Gaza, garantizando que lxs palestinxs no puedan producir alimentos para sí mismos. Al destruir sistemáticamente la producción alimentaria de Gaza, impedir la entrada de alimentos y obstruir violentamente la ayuda humanitaria, la ocupación israelí está imponiendo la inanición masiva como herramienta de genocidio y expansión colonial de lxs colonxs.
Al mismo tiempo, los dirigentes israelíes están debatiendo activamente planes para anexionarse Gaza, dejando claro que esta campaña de hambruna forma parte de su estrategia de desplazamiento masivo. La destrucción de la agricultura palestina y la hambruna forzada en Gaza reflejan las políticas coloniales de lxs colonxs en Cisjordania, donde el robo de tierras y la expansión de los asentamientos continúan con impunidad.
Hacer pasar hambre a los civiles como método de guerra constituye una grave violación del derecho internacional. En virtud del Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional y del IV Convenio de Ginebra, está tipificado como crimen de guerra y crimen contra la humanidad, lo que exige una urgente rendición de cuentas a escala internacional.
Hacemos un llamamiento a los movimientos populares, los sindicatos y la sociedad civil de todo el mundo para que intensifiquen la presión, poniendo fin a la complicidad con un régimen que convierte el hambre en un arma. La comunidad internacional debe actuar de inmediato para detener antes la campaña israelí de hambruna y genocidio.
UAWC pide:
- La entrada inmediata e incondicional de alimentos, agua y ayuda humanitaria en la Franja de Gaza
- Fin inmediato y permanente de guerra genocida israelí
- El Embargo de armas y fin de todo apoyo militar y financiero a la ocupación israelí
- Apoyo a la soberanía alimentaria palestina y a la rehabilitación agrícola para reconstruir la capacidad de Gaza de mantenerse a sí misma.

Matar de hambre a una nación a la vista de todxs no sólo un crimen, es una prueba de humanidad. El silencio es complicidad.
Fuente: La Vía Campesina