Paraguay: De la resistencia o la defensa de los territorios
El pasado sábado 1 de febrero, pobladores de Luz Bella observaban atónitos como una topadora, con resguardo policial, deforestaba un lote en su comunidad, en plena vigencia de la Ley de Deforestación Cero en la Región Oriental. Toda la comunidad, de norte a sur (según palabras de los luzbellanos) se unió para detener este delito ecológico. Esto les costó una violenta represión por parte de la policía. La gente estaba ejerciendo su derecho a la defensa de la vida. Luz Bella, con las manos de todos los paraguayos en las suyas, estaba previniendo la comisión de un delito.
Luz Bella es una colonia del distrito de Guayaibí, Dpto. San Pedro, conformada en 1973. En el año 1998 inició un proceso de planificación territorial con la creación de un Centro Ecourbanístico que delinea los parámetros de desarrollo de la comunidad. No fue sino hasta el 2005 que la soja y los agronegocios irrumpieron en la zona, iniciando un proceso de degradación y fuertes impactos socioambientales.
Esta situación impulsó a organizaciones de Luz Bella, entre ellas la ACPAE-LB (Asociación Campesina de Productores Alternativos y Ecológicos de Luz Bella), a dar los primeros pasos con autoridades locales de Guayaibí en la elaboración de un Plan de Ordenamiento Territorial (POT), herramienta clave para detener la destrucción que acompaña el avance del agronegocio.
Los relatos de pobladores de la Colonia Luz Bella indican la reaparición de conocidas prácticas de la dictadura stronista como el amedrentamiento, mediante extraños que incursionan en la comunidad para ‘recabar’ información sobre líderes y dirigentes comunitarios en base a amenazas. Un día después de la represión, un confuso episodio tiñe de sangre la Colonia Luz Bella con el asesinato de un poblador. El conflicto está instalado.
Este es apenas uno de los tantos casos de los conflictos que se están viviendo en estos días en el campo. Conflictos motivados por el avance agresivo de los agronegocios, de la mano de fumigaciones ilegales y desmontes ilegales en varias zonas de la Región Oriental del Paraguay.
Una mirada rápida de las manifestaciones, movilizaciones y acciones del sector campesino configura con mucha claridad un mapa de la resistencia en el Paraguay, que también puede ser visto como el mapa real de la soberanía sobre los territorios. Comunidades y asentamientos en los departamentos de Alto Paraná (El Triunfo, en Minga Guazú; Lote Ocho, en Minga Porá; San Isidro, en Los Cedrales; Chino Kue y Tierra Prometida, en Itakyry; Pto. Indio, en Mbaracayú), San Pedro (Luz Bella, en Guayaibí; asentamiento Estrellita Aguaray y Colonia Ara Vera, Compañía 8 de Diciembre, Colonia San Vicente, asentamiento Crescencio González, en General Resquín; Tapiracuai Loma, en Capi’ibary), Canindeyú (Maracaná, Colonia Tava Jopói, Marina Kue, Suizo Kue, en Curuguaty), Caaguazú (Distrito de La Pastora; Comunidad Tacuatí Guazú, en San Joaquín; Colonia Ñurumi, en Repatriación), son algunos ejemplos de la defensa de los territorios por parte de los campesinos en nuestro país.
Se ha observado un tratamiento sumamente desprolijo de parte de las autoridades en el manejo del conflicto. Varias de ellas han manifestado incapacidad institucional, rehuyendo así de los roles que les competen y que son la justificación misma de su existencia.
La resistencia no genera violencia, como muchos sectores quieren hacer creer. La resistencia es un acto de defensa, defensa de la vida, de la salud de los territorios y su gente. La fuente de la violencia es otra. La violencia es generada por quienes se apoyan en la ilegalidad para ‘producir’, contaminando a su paso y degradando la calidad de los ecosistemas, deteriorando el buen vivir de la gente.
La resistencia es criminalizada en este esquema irracional donde las acciones del gobierno determinan un resguardo del interés particular por sobre el interés común.
Nuestro apoyo hoy, el único posible, es a la resistencia. El apoyo a los Defensores de los Derechos de la Naturaleza.
SOBREVIVENCIA, Amigos de la Tierra Paraguay
7 de febrero de 2014
Fuente: SOBREVIVENCIA