El error de uniformar las autonomías: Guillermo Palma del pueblo Rarámuri
“¿Cómo hacer para que a los pueblos indígenas nos comprenda el pueblo mestizo? Solemos hablar sin entendernos, al indígena hacemos que se le escucha, hacemos como que le damos la palabra. A pesar de que este es un país pluricultural, hemos avanzado muy poco para entendernos. Pero para poder intercambiar con los pueblos mestizos hay que entender que nuestras cosmovisiones son diferentes y que hay mucho sobre lo que nunca nos vamos a poder entender”.
La frase fue dicha con suma calma, reforzada en la potencias de la idea largada al aire, por la boca de Guillermo Palma, que vino a representar a los Rarámuri en una de las mesas del Seminario “Tejiendo voces por la casa común”, en el gigantezco campus que la Universidad Iberoamericana tiene en el Distrito Federal.
Al final del coloquio, Guillermo se detuvo a conversar sobre algunos conceptos polémicos que vertió durante su alocución: el peligro de uniformar procesos autonómicos, que son territoriales y por tanto únicos y particulares, pero sobre todo, de los riesgos de obtener (y trabajar por) el reconocimiento de pueblo indígena por parte del gobierno.
¿En dónde se asienta el pueblo Rarámuri?
En el estado de Chihuahua, en el norte del país, pegado a estados unidos. Son pequeñas rancherías (incluso en cuevas) en donde nos asentamos, pero es todo parte del mismo pueblo. Es un territorio de bosque, sobre todo de coníferas, y barrancas muy profundas (por eso también se les llama Tarahumaras, como endónimo de la Sierra que los cobija y que forma parte de la sierra madre) en donde a los dos kilómetros de altura puede estar nevado, y abajo comiendo naranjos de tierra muy cálida. En ese lugar vivimos, es muy bonito y por lo bonito también hay muchos intereses turísticos, y por la barranca también hay muchos proyectos mineros.
¿Hay mucha presión de ese tipo de proyectos?
Ahorita se está trabajando fuertemente en la minería y también en proyectos turísticos que, se dice, pretenden integrar a los pueblos indígenas al desarrollo nacional y en realidad, el indígena muchas veces ni siquiera se ve beneficiado, porque tiene otra manera de ver esa economía con el “buen vivir”. Los rarámuri no hemos resistido a integrarnos al desarrollo económico. Ellos piensan que esas concepciones son un atraso, un lastre al desarrollo del país, pero nosotros entendemos de manera diferente lo que es la pobreza, el desarrollo o el concepto de “vivir mejor”, de vivir con austeridad, entendiendo la responsabilidad por este mundo que no es nuestro, lo heredamos de nuestros antepasados.
Mencionaste que hay momentos en que el diálogo no es posible porque hay cosas que no se pueden traducir, ¿qué significa eso?
Muchas veces no hay equivalente para decir ciertas cosas, para nosotros no hay un equivalente para decir libertad, amor. Aunque creo que el diálogo es bien difícil, creo que el dialogo es posible hacerlo, pero tiene que entrar por otro lado que no sea por acá (se señala la sien), sino por acá (se toca el pecho), por los sentidos.
¿Por el contacto?
No sé si es por el contacto, de alguna manera que nos entendemos aunque no necesariamente sea desde la racionalidad, algo que entra por otro lado, no sé como explicarlo.
También decías que hay distintos tipos de autonomía y que no es bueno tratar de uniformarlas, ¿a que te refieres? ¿Cómo se vive la autonomía en el norte?
Entiendo que el concepto de autonomía es tomado de occidente. Por lo menos, no existe como explicarlo desde lo Rarámuri, simplemente se hace la vida ¿y que haces en la vida? Pues vives en comunidad: te relacionas con el otro, dices palabra en tu propia lengua, razonas en tu propia manera de construir el pensamiento. La autonomía se construye según la manera en como la vivimos. Para nosotros, ejercer la autonomía tiene que ver con hacer fiesta, conocer tu territorio, cumplir con un encargo que te dejaron desde la antigüedad que son un montón de saberes y estar en ese espacio. Creo que cada pueblo indígena tiene que construir su propio concepto, no uniformarlo, o sesgarlo, o ceñirlo a una sola forma que nos englobe a todos, porque no todos lo hacemos de la misma manera. Los zapatistas y otras organizaciones del sur lo hacen a su manera. En muchas cosas podemos coincidir y podemos parecernos mucho, pero cada territorio, cada lengua, cada historia, construye su propia autonomía.
¿Es esa la riqueza de un México tan amplio y tan variado?
Exacto.
¿De dónde crees que viene la tendencia a la uniformidad? ¿Por qué?
Híjole creo que es algo… (duda, demora en contestar, medita) es algo que nos ofrece la cultura occidental, que tiende mucho a uniformar las cosas. En el país hubo intención de uniformar a los pueblos indígenas metiéndolos a centros de integración social como le llamaban y más bien fueron centros de desintegración social de su propia cultura. Es algo que nos ofrece esta cultura que está sobre nosotros y que esa es su manera de entender este mundo y vivirlo, es respetable, pero que no a todos no resulta. Al uniformar las cosas se pierde un montón de riqueza, de visiones y de vivir bien en este espacio.
¿Rechazaron la posibilidad de ser reconocidos como pueblo indígena por el gobierno?
No fue que lo rechazamos, más bien no tenemos necesidad de que el gobierno nos reconozca. Otros pueblos indígenas luchan por un reconocimiento de su territorio, de su lengua, pero ¿por qué tiene que estar reconociendo él (el gobierno) si yo me reconozco como soy? Tengo mi lengua, mi historia y me basta con que me reconozca el otro, ¿no?. Entonces, si buscamos el reconocimiento del Estado, nos estamos metiendo a un juego en que las reglas las tiene otro.
¿No es una protección ese reconocimiento?
Ganando estamos perdiendo. El pueblo Rarámuri no se humilla y no necesitamos que alguien esté diciendo: “ya te reconocí, sé que eres así”. No hay manera de hacerlo, soy ser humano y tú también, yo tengo mi historia y tu también pero, ¿cómo lo reconoces? ¿Con un documento en que firmo y ya, me decretas como pueblo? Eso no encaja ente nosotros, el dialogo epistemológico en ese momento no es posible, porque hay un desfase. No hay una manera de comunicar eso por eso decía que hay muchas cosas que no nos vamos a entender. Cuando el gobierno reconoce un territorio como indígena ¿lo hace en sus propios términos o en los nuestros? ¿para qué lo queremos? ¿para someternos a ese concepto? Pues no.
¿Afecta la identidad de los pueblos que lo intentan?
Claro, mucho.
¿Cómo? ¿Los desgasta?
Porque tenemos que vivir en el territorio haciendo con las reglas que nos ofrece el Estado.
Por Eliana Gilet
Fuente: Desinformémonos