Apoyo internacional por el Apruebo de la Nueva Constitución
La propuesta de Nueva Constitución para Chile refleja las preocupaciones por la emergencia climática y presenta lecciones indispensables para países de la región y el mundo. Celebramos que incluya el derecho a vivir en un ambiente sano y que sea la primera Constitución en el mundo en reconocer la crisis climática y ecológica.
1. El último informe del IPCC señala que muchas consecuencias de la emergencia climática ya son irreversibles, y que, si no reducimos a la mitad las emisiones de gases de efecto invernadero antes del 2030, el aumento de temperatura del planeta superará la barrera de 1,5°. Los y las personas dedicadas a la protección ambiental sabemos que este desafío central de la humanidad no puede abordarse con medidas aisladas o cosméticas, sino que obliga a nuestras sociedades a repensar profundamente nuestros sistemas e instituciones sociales.
2. Los y las abajo firmantes afirmamos que la propuesta de Nueva Constitución para Chile refleja dichas preocupaciones y presenta lecciones indispensables para países de la región y el mundo. Celebramos que incluya el derecho a vivir en un ambiente sano y que sea la primera Constitución en el mundo en reconocer la crisis climática y ecológica. Además, establece la obligación de que el Estado adopte una administración ecológicamente responsable, y medidas de prevención, adaptación y mitigación de los riesgos que genere esta crisis. En esa línea, el proyecto constitucional chileno establece una estructura normativa interna robusta, y que realza la cooperación internacional para enfrentar el cambio climático y la degradación de nuestra biodiversidad. Estas son, cuestiones esenciales para establecer lineamientos regionales y globales en contexto de crisis climática.
3. Valoramos positivamente como el proyecto de nueva constitución chilena también avanza en la protección de la naturaleza. Primero, reconoce sus derechos, y segundo, establece un deber de custodia del Estado sobre los bienes comunes naturales. Este deber de custodia opera sobre el agua, el aire, el mar territorial, los glaciares, entre otros. Además, el proyecto constitucional contempla instituciones concretas que contribuirán al cumplimiento de obligaciones ecológicas del Estado y sus ciudadanos, como lo es la Defensoría de la Naturaleza. Institución que se propone como un órgano autónomo que fiscalizará a los órganos de la administración del Estado y entidades privadas para proteger la biodiversidad y los derechos de la naturaleza.
4. Todas estas reglas, innovadoras y atingentes a la crisis climática y ecológica que vivimos, constituyen un empuje enérgico para el futuro de la humanidad, fijándonos un horizonte a todos quienes, a nivel mundial, luchan por la protección del ambiente y el bienestar de las generaciones presentes y futuras. Con el convencimiento de que el contexto adverso que enfrentamos como humanidad requiere de acciones decididas, certeras y profundas, creemos que la Nueva Constitución chilena es un avance sustancial para el país, y significa un progreso regional y global para que los Estados adapten sus instituciones a una situación de crisis climática y ecológica.
5. Es particularmente valioso que un país del Sur Global establezca un marco de ambición coherente con los desafíos climáticos y ecológicos actuales, demostrando la solidaridad de los y las chilenas con la lucha climática global y que esperamos sea fuente de inspiración para el mundo. Desde nuestros espacios, organizaciones y comunidades, esperamos con entusiasmo que se apruebe la nueva Constitución de Chile y saludamos con mucho afecto al pueblo chileno. La nueva Constitución Ecológica de Chile, será también nuestra Constitución Ecológica.
Listado de firmantes:
Fuente: Observatorio Latinoamericano de Conflictos Ambientales