Estamos en un contexto de emergencia social, ecológica y climática. La desigualdad en torno a la tenencia de la tierra, que expulsa a los habitantes de las zonas rurales hacia los cinturones de pobreza urbana, pone en extremo peligro a los sistemas alimentarios regionales y globales. En la Argentina el acceso a la tierra para la producción de alimentos nunca tuvo tratamiento legislativo. Es por esto que desde múltiples espacios socioambientales y campesinos exigimos con urgencia el debate público alrededor de la propiedad de la tierra y sus usos.