Silvia Ribeiro

Hoy hablar de árboles -o de flores- es nombrar alevosías. Sobre todo cuando los bosques y los recursos naturales son codiciados por las grandes empresas madereras, petroleras, mineras y están en los territorios de los pueblos originarios o de comunidades locales que los cuidan hace décadas o siglos. Mientras campesinos, indígenas y otras víctimas del llamado "progreso" protestan por sus derechos más elementales, los de arriba responden con cinismo y violencia inusitada, como si estas demandas fueran un insulto

Hablar de árboles

Con esta sencilla y contundente afirmación, los vecinos de Cuautla resumen su lucha contra la instalación de la gasolinera Milenium 3000. No están solos, en ningún sentido. Según trajo a la luz el recorrido de la otra campaña, hay luchas similares en Cuernavaca y Morelia

México: ¡Agua sí, gasolina no!

Los medios que han atacado sin tregua la acción de Via Campesina, no consideran vandalismo que Aracruz, la mayor empresa global de plantaciones de eucaliptos para celulosa blanqueada, tenga un historial devastador de destrucción de tierras, biodiversidad y fuentes de agua en el norte de Brasil, o que haya provocado el desplazamiento de miles de habitantes de las comunidades negras e indígenas de esa zona. Tampoco que hayan comprado los terrenos de sus plantaciones durante la dictadura a dueños ilegítimos que se habían apropiado de la tierra de los pueblos tupinikim y guaraní

Rompiendo el silencio del desierto verde

Transnacionais do agronegócio criam estratégias para transformar agricultura e a alimentação em mercadoria. Entrevista a Silvia Ribeiro: "Trata-se de uma das maiores agressões das indústrias e do agronegócio contra a alimentação de todo mundo. “Todas as maneiras de resistir estão diretamente relacionadas à organização dos camponeses e à solidariedade de outros movimentos”

Árvore transgênica, a bola da vez

La política internacional es como una cocina: se juntan unos pocos en nombre de los gobiernos y, con las empresas trasnacionales, refríen los platos que nos obligarán a comer a todos. Esta vez el propio escenario hizo evidente lo que había detrás. La octava Conferencia de las Partes del Convenio de Diversidad Biológica (CDB) en Curitiba, Brasil, se realizó en un local de exposiciones comerciales llamado Expotrade. Los ministros se reunieron en los locales de un shopping mall

Príncipes y mercaderes de la biodiversidad

Mantener la moratoria contra Terminator es un hecho importante y relevante para millares de campesinos e indígenas, así como para las posibilidades de todos de decidir qué comemos y que no lo hagan las trasnacionales. Pero quizá el mensaje principal fue otro, que no quedó en papel y sin embargo no se borra: los condenados de la tierra no aceptan su condena, ni a sus verdugos ni a quienes mediante leyes nacionales e internacionales legalizan los privilegios de los poderosos

Semillas, tierra y agua: los idus de marzo

A finales de los años 90, el gobierno de Estados Unidos desarrolló, junto a la compañía semillera Delta & Pine Land, la tecnología transgénica "Terminator" para producir semillas estériles en la segunda generación. Las semillas "suicidas" no tienen ningún sentido salvo para las empresas: el objetivo es impedir que los agricultores reproduzcan su semilla, obligándolos a comprar semillas nuevas para cada ciclo de siembra

Terminator: hacia la bioesclavitud

El 16 de febrero de 2006, culmina otra farsa de enorme impacto para los derechos y las culturas indígenas de México: ese día se cierra lo que el gobierno, a través de la Secretaría de Agricultura (Sagarpa) llama una "consulta pública" sobre la liberación de maíz transgénico en México, centro de origen del cultivo

Maíz transgénico: celebrando la traición