"Debido a la larga permanencia en la atmósfera del CO2, la necesaria y drástica reducción de sus emisiones hoy tardará aún décadas en tener su efecto, mientras que los efectos de reducir las emisiones de metano hoy se traducirán en una reducción del aumento de temperatura a mucho más corto plazo. Abandonar los combustibles fósiles en general, incluyendo el gas, es la única salida sensata que tenemos."