La siguiente declaración, producto de la reflexión colectiva de una vasta red en defensa del maíz nativo en México, que sin aspavientos viene trabajando desde la base social de comunidades y pueblos para defender la vida campesina e indígena a partir de una propuesta integral de autonomía y territorio, nos alienta a continuar el trabajo de vinculación entre las diversas luchas del continente. Aunque fue emitida el 16 de mayo de 2007, su vigencia no puede ser más actual, en un momento en que en México se recrudecen los efectos del Tratado de Libre Comercio de América del Norte y comienza a prepararse la COP-9 del Convenio de Diversidad Biológica, donde pende de nuevo la amenaza de que se santifique el control corporativo sobre las semillas y se extremen las condiciones de superviviencia de la diversidad biológica y cultural.