Al hablar de violencia contra el pueblo mapuche en Chile, estamos hablando de historias y memorias largas, de violencias que brotaron con la brutal invasión colonial española y que se profundizaron y se agudizaron con la mal llamada “Pacificación de la Araucanía.” Hoy vemos cómo esta violencia estatal racista se reproduce y se encarna en un modelo de desarrollo centrado en el extractivismo,