Los pueblos fumigados queremos hacer pública la constatación del fuerte contraste entre las demandas de poblaciones enteras, alarmadas por el aumento exponencial de enfermedades de todo tipo vinculadas directamente al modelo agrario y la respuesta “de facto” del complejo agroproductor quien sólo atina a huir hacia adelante, produciendo operaciones mediáticas y nuevos experimentos transgénicos, conducta particularmente agravada por la participación de agencias oficiales.