En la 8va edición del Compendio de hallazgos científicos sobre el fracking, presentado la semana pasada por Concerned Health Professionals of New York (un programa de The Science and Environmental Health Network) y Physicians for Social Responsibility, se ofrecen pruebas que indican que el metano proveniente de las operaciones de fracking de Norteamérica acelera la crisis climática. Las catástrofes que desencadena el cambio climático —inundaciones, sequías, incendios forestales y malas cosechas— dejan a más de 3000 millones de personas en situación de alta vulnerabilidad.