En un año la deforestación de la Amazonía brasileña llegó a uno de los puntos más altos de los que se tiene registro: entre el 2003 y el 2004 la mayor reserva de biodiversidad del mundo perdió más de 26 mil kilómetros cuadrados, un capítulo más en la historia de depredación incesante que ya acabó con 680 mil kilómetros de ese territorio, un área equivalente a Francia y portugal juntos