"Es urgente un cambio de actitud y de mentalidad en estas condiciones peligrosas de la industria. Es inaceptable la tasa de fatalidades en la actividad minera y es necesaria una mayor solidaridad global para evitar estos descuidos y abusos."
"La depredación ecológica en las minas y lugares adyacentes, una vez más es producto de una política unilateral y exenta de visión que sólo atiende al interés de un sector: el de las compañías mineras."