"Tras este intento de represión política y mediática de la consulta, la dimensión de la misma cobra mayor importancia que la que tenía en un principio. Ya no sólo es importante la afirmación o negación de los deseos e intereses de una población frente al caso Majaz, sino que esta consulta se convierte ahora en una poderosa herramienta para decirle al país que la población rural de esos distritos existe y que tiene los mismos derechos que el resto: un derecho a decidir sobre su futuro y sobre el modelo de desarrollo para su región"