A los Pueblos Indígenas decimos que no se dejen avasallar por esta política despiadada que nos condena a dejar de existir, la cual se escuda en una propaganda burda e hipócrita que intenta confundir a la sociedad. Mantengan firme el espíritu de Libertad, y que en cada corazón indígena sea depositario del sublime tesoro que poseemos, la Fuerza de nuestra Dignidad