"Entre otras cosas, el nuevo reglamento facilitará y acelerará la aprobación de proyectos hidroeléctricos nuevos, y relajará las exigencias a las centrales en operación al permitirles operar sin contar con la recepción definitiva. Otra situación preocupante son diversas otras modificaciones a normativas ambientales, entre ellas las del reglamento del Sistema de Evaluación Ambiental (SEA), que en simples palabras da cuenta que de un limitado instrumento se pretende seguir retrocediendo."