"Declaramos que las semillas son un patrimonio ancestral de los pueblos originarios y campesinos, por lo tanto están unidos a nuestra cultura. Por eso rechazamos la adhesión de Chile al convenio UPOV 91, puesto que transgrede, atropella y agrede nuestros legítimos derechos, a crear, mejorar y seguir utilizando la biodiversidad agrícola y alimentaria. “