"Tal parece que el capitalismo moderno quiere reeditar las condiciones de la esclavitud como la forma de acrecentar las ganancias, por ello la felicidad en el rostro de Santos y Harper, socios en la tarea de saquear los recursos minerales de Colombia sin importar el precio para los colombianos, siempre y cuando se garantice enormes utilidades a los inversionistas de la Pacific y la Medoro."