Un grupo de 736 productores de los municipios de Tuxpan, Cuautitlán de García Barragán, Zapotitlán de Vadillo y Tolimán, en el sur de Jalisco, demostraron la calidad genética de los maíces criollos negro, morado, rojo y blanco, pues sus cultivos estuvieron expuestos a una sequía, el huracán Patricia, las inundaciones posteriores y la constante caída de ceniza del volcán de Colima, dijo Doroteo Caro Valderrama, coordinador del Programa de Modernización Sustentable de la Agricultura de la Secretaría de Desarrollo Regional.