Desde el año 2003 organizaciones campesinas e indígenas de México resisten un megaproyecto hidroeléctrico que afectará a cerca de 25.000 personas de cinco municipios del Estado de Guerrero, inundando unas 17.000 hectáreas con el represamiento del Río Papagayo. El proyecto, de supuesto "desarrollo", se ha impuesto a las comunidades en base a claras ilegalidades federales y estatales. Biodiversidad visitó la zona y habló con los habitantes de las comunidades que resisten