COEXISTENCIA CON TRANSGÉNICOS, NO, NO Y NO. NI PRODUCIDOS, NI IMPORTADOS, NI CONSUMIDOS. Las grandes ONGs ecologistas (Greenpeace, Amigos de la Tierra, Ecologistas en Acción) y la COAG (Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos) reconocieron la imposibilidad de coexistencia entre cultivos transgénicos y no transgénicos sin que los últimos acaben necesariamente contaminados por los primeros. Esta buena noticia, sobre todo para el sector agroecológico, nos hizo concebir la esperanza de recuperar la unidad del movimiento en torno a una oposición verdadera a los transgénicos. Sin embargo, los hechos van por otro lado. El doble lenguaje de las burocracias que lideran el ya inexistente “movimiento antitransgénicos” reaparece de nuevo, al igual que el sectarismo hacia quienes defienden el principio de precaución bien entendido y la seguridad alimentaria.