En el Cauca se encuentran levantadas las comunidades indígenas, afrocolombianas y campesinas contra el TLC y el incumplimiento de los acuerdos sobre tierra. Ante toda esta bomba social que asoma por todos los frentes la única salida es tildar de terroristas a los manifestantes y señalar inquisitoriamente a las voces contestatarias para poder lanzar contra ellos todo el andamiaje de la cada vez más desgastada política de "seguridad democrática"