Paraguay es uno de los países con mayores índices de desigualdad del mundo. Allí reinan las transnacionales del sector financiero y del agronegocio que nunca ocultaron que iban a conseguir la aprobación de las semillas de Monsanto a como diera lugar. La realidad de un territorio sembrado de grandes latifundios y haciendas con asentamientos de labriegos viviendo en carpas.