Utrera y Lebrija son algunos de los ocho pueblos andaluces en los que una de las más temidas, poderosas y criticadas multinacionales del mundo, la estadounidense Monsanto, junto con Pioneer y Procase quiere ampliar sus cultivos de maíz transgénico con el permiso del Gobierno de España, el único de la UE que permite el cultivo a gran escala de los alimentos modificados genéticamente