Recientemente la Chevron Corp. (a quien en Ecuador conocemos como Texaco) denunció que sus abogados habían sido intimidados por activistas que se manifestaron frente a sus instalaciones en Quito, afirmando que se trataba de una estrategia para enrarecer el ambiente que rodea el juicio y evitar que la empresa tenga un “juicio justo y libre de influencia política en el Ecuador”.