El 25 de noviembre una marcha pacífica de unas 300 mil personas fue disuelta a balazos, hay muchos compañeros desaparecidos y por lo menos unos 20 heridos de bala; ese día más de 200 compañeros fueron detenidos y torturados por la Policía Federal y enviados a cárceles muy lejanas. La situación es extremadamente grave, pero no la lucha del pueblo de Oaxaca no se detiene, no daremos un paso atrás en nuestra lucha por democratizar desde abajo a nuestro país