Desde épocas ancestrales, la provincia de Jujuy, situada en el noroeste de Argentina y cuyo límite al oeste es la Cordillera de los Andes, ha basado su estructura económica en la industria minera, extrayendo con el método del socavón y actualmente a cielo abierto, minerales y metales como plomo, plata, cobre y oro. Recientemente, movimientos campesinos e indígenas, como la Red Puna, y organizaciones sociales como Tupaj Katari, comenzaron un proceso de articulación, cristalizado en acciones culturales y políticas, trasladando la problemática que viven las comunidades puneñas a la ciudad, con el objetivo de detener el auge extractivo y denunciar los impactos socioambientales que deja la minería a gran escala, proponiendo desde la mirada campesina la construcción de alternativas productivas y laborales basadas en la soberanía alimentaria.