La sociedad civil brasileña y internacional denuncia que la inserción de los bosques en los mercados puede hipotecar las tierras y territorios de los países del sur global
El lunes (12/09), más de 70 organizaciones firmaron la “COP 25 – No a las compensaciones forestales en el artículo 6 del Acuerdo de París”, en la que defienden la posición histórica de Brasil en contra a los bosques en el mercado de carbono. Movimientos sociales, ONGs ambientalistas, organismos representativos, organizaciones indígenas y comunidades tradicionales expresaron su apoyo.
En el texto, las entidades denuncian la compensación forestal (offset) como una falsa solución: “algunos actores han utilizado la COP25, la crisis política por la que atraviesa el país y los dramáticos reveses ambientales, especialmente en la Amazonía y en el Cerrado (sabana), como pretexto para exigir medidas a favor de la monetización de los activos forestales del país, creando posibilidades de mercantilización del bosque, que serían transformadas en créditos de CO2 para compensar las emisiones de GEI de otros países. Las organizaciones que firmaron esta carta ven con preocupación estas propuestas y defienden el mantenimiento de la posición histórica de Brasil contra las compensaciones forestales, acordando que cualquier cambio en esta dirección pondría en peligro la integridad ambiental del país y del planeta”, dice la nota.
Madrid, 9 de diciembre de 2019.
COP 25 – No a los offsets forestales en el Artículo 6 del Acuerdo de París
Durante los 25 años de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, muchas propuestas han surgido como una solución a la crisis climática. Incluir bosques en las compensaciones de carbono es uno de estos. Desde que se presentaron las primeras propuestas sobre el tema, numerosas organizaciones y movimientos sociales, ONG, representantes de pueblos indígenas, pueblos y comunidades tradicionales en Brasil y en todo el mundo han expresado inquietudes y denunciado lo que convencionalmente se ha llamado la falsa solución a crisis del clima.
En el contexto actual de las negociaciones internacionales, los países están a punto de regular el artículo 6 del Acuerdo de París. Este artículo presenta versiones actualizadas de los mecanismos de flexibilidad que ya existen en el Protocolo de Kyoto: implementación conjunta, ahora llamada enfoque cooperativo, y el Mecanismo de Desarrollo Limpio, ahora el Mecanismo de Desarrollo Sostenible. Desde su introducción, incluidas las versiones más recientes del Acuerdo de París, la sociedad civil ha rechazado las diferentes formas en que los países están exentos de cumplir con sus responsabilidades, a expensas de las acciones implementadas en los territorios de otros países, como la Amazonía brasileña. En nombre de obtener recursos para la acción climática y con el objetivo de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero / GEE al menor costo posible, estamos a punto de legitimar una reimpresión de los mecanismos de compensación de carbono forestal (offsets). La valorización del bosque en pie no puede ser a expensas de la transferencia de responsabilidades. Creemos que los países deberían reducir sus emisiones dentro de sus territorios, así como financiar el Fondo Verde para el Clima, un compromiso que ya se ha hecho incondicionalmente.
En este contexto, el Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático / IPCC, en su informe sobre Cambio Climático y Tierra, refuerza esa tendencia a apostar por las llamadas nature based solutions, que deben representar 1/3 de las reducciones de emisiones. Esta narrativa, si bien llama la atención sobre puntos importantes, puede reciclar viejas soluciones falsas.
En la coyuntura nacional, algunos actores han estado utilizando COP25, la crisis política por la que atraviesa el país y los dramáticos reveses ambientales, especialmente en el Amazonas y el Cerrado, como pretexto para exigir medidas para monetizar los activos forestales del país, creando posibilidades comercializar el bosque, que se transformaría en créditos de CO2, para compensar las emisiones de GEE de otros países. Las organizaciones firmantes de esta carta consideran estas propuestas preocupantes y abogan por mantener la posición histórica de Brasil frente a las compensaciones forestales, acordando que cualquier cambio podría poner en peligro la integridad ambiental del país y del planeta.
¿Por qué los offsets forestales son una solución falsa?
1) La transformación de los bosques en activos de capital natural monetizables implica una pérdida de soberanía sobre los territorios, tanto para las poblaciones como para el Estado brasileño. Las condiciones para monitorear los activos intangibles dependen de una enorme infraestructura de monitoreo y control, incluso a través de satélites. Vender estos activos (carbono del bosque, el Cerrado y otros biomas y ecosistemas) a otros países y empresas tendrá implicaciones para la gobernanza y la autodeterminación en el futuro.
2) Además, los offsets forestales sirven como incentivo para que los países mantengan la ambición de sus compromisos en mismo nivel. La base del Acuerdo de París depende de los compromisos nacionales determinados voluntariamente por cada gobierno, y solo los cortes de emisiones más allá de esos compromisos podrían negociarse en mercados offsets. Con offsets, cuanto más bajos son los compromisos nacionales, más queda por vender, creando un estímulo para la baja ambición.
3) No aportan ningún beneficio adicional a la reducción de emisiones porque es un juego de suma cero. Nunca son reducciones efectivas, porque hay una compensación. Lo que se reduce a través de las emisiones no forestales se sigue emitiendo en otro sector.
4) La venta de créditos de reducción de emisiones, hechas a partir de largos compromisos, también implica las hipotecas futuras de miles de personas que ya nacerán sin que el Estado y las personas en sus territorios tengan soberanía sobre las políticas y las acciones que pueden ser creados para la protección y uso de sus bienes comunes
5) La propuesta saca el foco de la confrontación con los verdaderos problemas forestales nacionales promovidos por grupos de interés que quieren debilitar las políticas de protección forestal en el país, y aún alimentan el discurso de aquellos que quieren socavar la legislación ambiental brasileña.
A nivel nacional, vemos un retroceso en las leyes y políticas que garantizan la protección de los derechos territoriales y el medio ambiente. En medio de esta crisis y ofensiva, vuelve el discurso de que la compra y venta de carbono forestal sería una solución para confrontar la creciente deforestación y capturar y recibir los recursos necesarios para la vigilancia y el monitoreo. Esto se combina con los esfuerzos para reconfigurar la Comisión Nacional para REDD + (CONAREDD +) y el Fondo Amazonas para que también puedan dar lugar a los offsets. Por atractivo que parezca el discurso, los argumentos anteriores muestran que está defendiendo una solución falsa destinada a beneficiar a un pequeño grupo de actores (aquellos que continuarían emitiendo gases de efecto invernadero o recibirían recursos movilizados), pero tendrían serias consecuencias para el Brasil y el mundo.
No podemos desviar la atención de las soluciones y políticas reales necesarias para enfrentar la crisis climática.
Por lo tanto, exigimos el mantenimiento de la posición histórica brasileña frente a las compensaciones forestales.
Firman:
350.org
350.org Brasil
350.org LatinoAmerica
Acción ecologica – Equador
Acción por la biodiversidad – Argentina
Alianza Biodiversidad
Amigos da Terra Brasil
Associação Paraense de Apoio às Comunidades Carentes (APACC)
Alternativas para Pequena Agricultura no Tocantins (APA-TO)
Articulação Nacional de Agroecologia (ANA)
Asociación Red de Coordinación en Biodiversidad (Costa Rica)
Associação Agroecológica Tijupá
Articulação Pacari_Raizeiras do Cerrado
Articulação PomerBr
Articulação Tocantinense de Agroecologia (ATA)
Associação Unidade e cooperação para o desenvolvimento dos povos (UCODEP)
Campanha Nacional em Defesa do Cerrado
Casa Fluminense
Centro Agroecológico
Centro de apoio a projetos de ação comunitária (CEAPAC)
Cero Fósiles LatinoAmerica
Coalicion LatinoAmerica contra El Fracking Por El Água Clima y Vida (COESUS)
Coordenação Nacional de Articulação das Comunidades Negras Rurais (CONAQ)
Comissão Pastoral da Terra (CPT)
Conselho Nacional das Populações Extrativistas (CNS)
Conselho Comunitário do Bailique (CCB)
Engajamundo
ETC México
FASE – Solidariedade e Educação
Federação dos Trabalhadores Rurais Agricultores e Agricultoras Familiares do Estado do Pará (FETAGRI-PA)
Fé, Paz e Clima
Fórum da Amazônia Oriental (FAOR)
Fórum de Mudanças Climáticas e Justiça Social (FMCJS)
Fundación ARAYARA
Fundación Gaia Pacha
Greenpeace Brasil
Grupo Carta de Belém
Grupo de Mulheres Brasileiras (GMB)
Jubileu Sul
Instituto de Estudos Socioeconômicos (INESC)
Instituto Brasileiro de Análises Sociais e Econômicas (IBASE)
Instituto Carvão Zero
Instituto Ecovida
Instituto Padre Ezequiel (IPER)
Manchineri Tshi Pinte Hajene (MATPHA)
Marcha Mundial das Mulheres (MMM)
Movimento Interestadual das Quebradeiras de Coco Babaçu (MIQCB)
Movimento de Mulheres Camponesas (MMC)
Movimento dos Atingidos por Barragens (MAB)
Movimento dos Pescadores (as) artesanais do Brasil (MPP)
Movimento dos Pequenos Agricultores (MPA)
Movimento pela Soberania Popular na Mineração (MAM)
Movimento dos Trabalhadores e Trabalhadoras Rurais Sem Terra
Não Fracking Brasil
Núcleo Educamemória
Observatório do Carvão Mineral (OCM)
Pomer Pampa
Ponto de Cultura Alimentar Iacitata
Rede de Agroecologia do Maranhão (RAMA)
Rede Bragantina de Economia Solidária Artes e Sabores
Rede Brasileira pela integração dos povos (REBRIP)
Rede Brasileira de justiça ambiental (RBJA)
Rede de Comunidades Tradicionais Pantaneira
Rede Guarany Brasil
Rede Guarany PY
Rede RAMA de Cultura Alimentar Amazônica
Sindicato dos Trabalhadores Rurais Agricultores e Agricultoras Familiares de Santarém (STTR/STM)
Terra de Direitos
Rede Bragantina de Economia Solidária Artes e Sabores
Rede de Comunidades Tradicionais Pantaneira
Rede Terra Sem Males
Rede JIRAU de Agroecologia
SOF – Sempre Viva Organização Feminista
Zero Fósseis
Fuente: Grupo Carta de Belém