El TLC UE-MERCOSUR viola los derechos de lxs campesinxs y los compromisos climáticos
Comunicado conjunto de La Coordinadora Europea Vía Campesina (ECVC) y La Coordinadora Latinoamericana de Organizaciones del Campo CLOC – Vía Campesina, a través del cual condenan el Tratado de Libre Comercio UE-MERCOSUR por antidemocrático y violatorio de los derechos de lxs campesinxs y de los compromisos climáticos. Esta declaración se produce en un momento en que la Comisión Europea y algunos Estados miembros de la UE intentan encontrar la manera de aprobar dicho acuerdo, sin tener en cuenta el control democrático de los parlamentos nacionales, el impacto real o la aplicación de las denominadas medidas medioambientales.
Como grupo de organizaciones de campesinxs y trabajadorxs agrícolas de países del Mercosur y de la UE, nos oponemos al Tratado de Libre Comercio UE-MERCOSUR. Este TLC se basa en un paradigma obsoleto en el que los productos agrícolas son tratados como cualquier otra mercancía, sin tener en cuenta los derechos humanos, las crisis climáticas y de la biodiversidad, la soberanía alimentaria y los derechos de lxs productorxs de alimentos a unos ingresos justos.
Durante muchos años, nosotrxs lxs agricultorxs, lxs agriculturxs campesinxs, los pueblos sin tierra, los pueblos afrodescendientes y lxs trabajadorxs agrícolas hemos sufrido las consecuencias de la regulación de los mercados agrícolas a través del régimen internacional de libre comercio. Los intereses de las empresas agroalimentarias se han antepuesto sistemáticamente a los de lxs pequeñxs productorxs de alimentos y trabajadorxs agrícolas. El precio de los alimentos que producimos se ha desvinculado artificialmente del coste de la producción local. Se nos pone a competir unxs con otrxs, a pesar de que nuestras condiciones de producción varían enormemente de un país a otro (por ejemplo, en lo que respecta a las condiciones climáticas, las normas sanitarias, sociales y medioambientales, el coste de la mano de obra, el acceso a la tierra y a las herramientas de producción, etc.).
La mercantilización de la tierra, el agua y las semillas conduce al empobrecimiento de la población rural. Las corporaciones que progresivamente se hacen con el control de los sistemas alimentarios sólo consiguen ser "competitivas" porque están fuertemente subvencionadas con dinero público y porque no se les exige que paguen los costes sanitarios, medioambientales y sociales de su modelo de producción industrial.
Nuestros derechos, reconocidos en la Declaración de las Naciones Unidas sobre los Derechos de los Campesinos y Otras Personas que Trabajan en Zonas Rurales, son violados estructuralmente por este régimen internacional de libre comercio. No vemos ninguna mención al UNDROP en el previsto TLC UE-MERCOSUR y tememos que este nuevo TLC pueda empeorar la situación de los derechos humanos de lxs campesinxs, pequeñxs agricultorxs y trabajadorxs agrícolas.
El acuerdo UE-MERCOSUR, en lugar de promover la reterritorialización ecológica de nuestros sistemas alimentarios, incrementará el intercambio transcontinental de productos agrícolas que más bien pueden producirse de forma sostenible y agroecológica en nuestros territorios. Desde el punto de vista de un sistema alimentario sostenible, esto está en total contradicción con todos los compromisos de nuestros gobiernos en el Acuerdo de París sobre el clima y en los objetivos de desarrollo sostenible.
Dicho acuerdo fomentará modelos de producción insostenibles en las zonas rurales, haciendo que aún más productorxs de alimentos a pequeña y mediana escala desaparezcan y emigren a lugares urbanos para trabajar en empleos precarios. En la UE, la población agraria ya representa menos del 5% del empleo total, mientras que en los países del MERCOSUR, la población rural se encuentra entre la población más marginada. ¿Coincide esto realmente con la visión a largo plazo de nuestros gobiernos para las zonas rurales?
Nuestros gobiernos dicen que este acuerdo contiene disposiciones de sostenibilidad y tiene en cuenta los intereses de lxs trabajadorxs y lxs campesinxs, pero no es cierto. Por el contrario, apoyan los intereses de una élite de la industria alimentaria, responsable del desastre ecológico de nuestras comunidades.
Es de sobra conocido que el acuerdo UE-MERCOSUR no puede ser ratificado de forma democrática. En Europa, la Comisión Europea y algunos Estados miembros de la UE están presionando para dividir el acuerdo como forma de eludir el control democrático de los parlamentos nacionales. Otros promueven elaborar un documento adicional no vinculante para fingir que están teniendo en cuenta las preocupaciones medioambientales. Condenamos enérgicamente estos intentos de maquillar de verde este TLC insostenible y de pasar por alto la fuerte oposición democrática que genera este nuevo TLC.
Es hora de abandonar el paradigma del libre comercio. El TLC UE-MERCOSUR debe abandonarse.
En cambio, como La Vía Campesina exigimos un nuevo marco internacional para el comercio internacional basado en la soberanía alimentaria. Apoyamos la cooperación internacional y la solidaridad entre los pueblos. Los acuerdos bilaterales o birregionales de cooperación deben tener como núcleo los derechos humanos, y en particular los derechos de lxs productorxs de alimentos reconocidos en la UNDROP. Deben permitir un auténtico desarrollo agrícola que dé prioridad a la producción local de alimentos y a la agroecología. Deben detener la expansión del poder corporativo en la alimentación y la agricultura y dar prioridad a lxs productorxs de alimentos a pequeña y mediana escala.
Como campesinxs, pequeñxs agricultorxs y trabajadores agrícolas de los dos continentes, hacemos un llamamiento a todos los movimientos sociales y organizaciones de la sociedad civil para que se opongan al acuerdo UE-MERCOSUR y exijan a nuestros gobiernos que detengan este acuerdo.
Firmas de los países de la UE :
- Coordinadora Europea Vía Campesina (ECVC) – Europa (31 organizaciones miembro)
- SOC-SAT (España)
- Ehne Bizkaia (España)
- Fugea (Bélgica)
- Norsk Bonde-og Smabrukarlag (Noruega)
- NOrdBruk (Suecia)
- Frie Bønder Levende (Dinañarca)
- ÖBV-Via Campesina Austria (Austria)
- MODEF (Francia)
- MAP (Bélgica)
- Boerenforum (Bélgica)
- La CNA – Confederação Nacional da Agricultura (Portugal)
- Toekomstboeren (Países Bajos)
- ARI (Italia)
- COAG (España)
- Confédération paysanne (Francia)
- MIJARC (Europa)
- Abl (Alemania)
- ACFF (Croacia)
Firmas de los países del Mercosur :
- Coordinadora Latinoamericana de Organizaciones del Campo – CLOC-Vía Campesina (América Latina y el Caribe – 84 organizaciones miembro)
- La Vía Campesina América del SurSudamérica (42 organizaciones miembro)
- MNCI Somos Tierra (Argentina)
- Conamuri, Organización de Mujeres Campesinas e Indígenas (Paraguay)
- Red Nacional de Semillas Nativas y Criollas (Uruguay)
- Mesa Agroalimentaria Argentina (Argentina)
- Movimiento dos pequenos agricultores – MPA (Brasil)
- MMC Brasil, Movimiento de mulheres camponesas (Brasil)
- Movimiento de los Trabajadores Rurales Sin Tierra – MST (Brasil)
Firmas de otras organizaciones en Europa y América latina :
- Federación Nacional de Cooperativas agropecuarias (Colombia)
- APEMECAFE (Colombia)
- FENSUAGRO (Colombia)
- Fenacoa (El Salvador)
- Comunidades Negras-ICETEX (Colombia)
- CAN Perú (Perú)
- Conpi (Colombia)
- Uniterre (Suiza)
Fuente: La Vía Campesina