Argentina: cáncer y leucemia a causa de plaguicidas
Los habitantes de un barrio periférico de la capital cordobesa denunciaron que repetidos casos de cáncer y enfermedades sanguíneas como la leucemia, el lupus y anemias hemolíticas que allí se suceden tienen relación con las fumigaciones de plantaciones de soja transgénica que bordean las viviendas
Los denunciantes viven en el barrio Ituzaingó Anexo, en la periferia sur de Córdoba capital, y sus casas están rodeadas por campos plantados con soja transgénica.
Un estudio epidemiológico encarado por la Municipalidad de Córdoba y llevado a cabo por Edgar Schinder, ex Presidente de la Sociedad Argentina de Medicina Ambiental y Miembro de GEENET-GETNET-OMS/OPS, demostró que el barrio debe considerarse inhabitable y ser evacuado, informaron los vecinos de Ituzaingó Anexo.
Sofía Gatica, referente del grupo de vecinos, denunció que mientras se aplica plaguicida "el viento lleva las sustancias peligrosas al barrio, donde sufrimos ardor de garganta, sequedad en la lengua, lagrimeo y reacciones alérgicas".
"Hace menos de un mes, el médico Edgardo Schinden divulgó un estudio independiente afirmando que nuestro barrio no puede ser habitado. El Gobierno de Córdoba no lo reconoce y ofrece pavimentar las calles e instalar un puesto de salud, en lugar de eliminar la fuente de la contaminación", indicó Gatica.
Los plaguicidas son utilizados en plantaciones de soja del tipo Roundup Ready (RR), patente de la empresa estadounidense Monsanto.
Responsabilidades
Por las enfermedades que sufren los habitantes del barrio, los vecinos responsabilizan a las fumigaciones en los campos de soja RR, acusando a los pesticidas por las graves afecciones de salud que sufren adultos y niños.
Según estimaciones de las organizaciones ambientalistas que estudian el caso, en Ituzaingó Anexo, un barrio de 5.000 habitantes, hay más de 400 enfermos de cáncer, leucemia, lupus y anemias hemolíticas.
Pero las denuncias por contaminación de pesticidas sojeros no son exclusivas de Ituzaingó Anexo: el barrio forma parte del grupo Víctimas de los Agronegocios, cuyo objetivo es denunciar los impactos socio ambientales del modelo agroexportador basado en los monocultivos de transgénicos.
Se trata de un grupo de habitantes de diversas localidades cordobesas, de Buenos Aires, Santa Fe y el Chaco, entre otros lugares del país.
"Cada uno de los pueblos tiene el mismo problema, a nosotros se nos va engrosando la lista", señaló Jorge Rulli, del Grupo de Reflexión Rural, entidad que impulsó la formación de Víctimas de los Agronegocios junto a las organizaciones GRAIN y Red por una América Latina Libre de Transgénicos.
También en Córdoba, la cuenca del lago Los Molinos, que junto con la de Embalse abastecen de agua a la mayor parte de la población de la provincia, estaría contaminada con residuos agrícolas.
Enrique Tuñón, presidente del Ente Intercomunal Los Molinos, acusó por la situación a la excesiva utilización de "agroquímicos para los cultivos", puesto que la zona aledaña al lago está cultivada con soja.
Rulli consideró que "la invasión de la soja es muy violenta" y destacó que el grupo de Víctimas de los Agronegocios "tiene cierto respaldo desde que está el intendente de Córdoba, Luis Juez, quien permitió una investigación más o menos independiente", en referencia al estudio encarado por Schinden.