Se lanzó el octavo Mes de la Agroecología

Argentina

La agroecología en la Argentina viene creciendo exponencialmente: en grupos de productores y productoras; con experiencias en todas las escalas, diversidad de producciones y variedad de ambientes; en trabajos científicos que validan lo que los territorios reflejan; en el entusiasmo de una juventud que se vuelca con fuerza a las cursos, diplomaturas y carreras que empiezan a aflorar a lo largo y ancho del país. El sistema científico-tecnológico es demandado cada vez con más fuerza para encontrar respuestas a la complejidad de las transiciones, y se tensionan los marcos normativos que dificultan que las producciones agroecológicas puedan encontrarse con quienes las demandan con fuerza en pueblos y ciudades. También avanza en políticas públicas e instancias gubernamentales en todos sus niveles, por ejemplo: la creación de la Dirección Nacional de Agroecología, el Programa de Agroecología de la provincia de Buenos Aires y la Ley de Fomento de Misiones, o la enorme diversidad de programas e iniciativas que desarrollan muchos municipios. 

La palabra “agroecología” adquirió una masividad inimaginable hasta hace pocos años, y a medida que el capital simbólico que contiene crece, su sentido empieza a ser disputado, incluso por organizaciones que han sido insignia de la llamada Revolución Verde en nuestro país y el mundo.

Esto que crece desde abajo, se superpone con el impulso al agronegocio desde las más altas esferas del Estado (y más allá): Argentina está entre los 3 primeros países exportadores de commodities agrícolas y es el de mayor liberación de agrotóxicos per cápita del mundo; inscribiéndose en cadenas globales como proveedor de materias primas controladas por un puñado de corporaciones transnacionales. El núcleo de estos intereses acaba de extorsionar con éxito al gobierno nacional para obtener un dólar diferencial e impulsa una ley de fomento a la agroindustria que estipula beneficios y exenciones impositivas, así como la profundización del uso de insumos de síntesis como agrotóxicos y fertilizantes, y eventos transgénicos; en paralelo el precio de los alimentos sube más que la inflación, y millones de compatriotas son empujados a la pobreza y la indigencia.

Aún en esta situación, estamos convencidxs de estar viviendo el ocaso de este modelo, ya que sus externalidades son cada vez más inocultables, millones en el campo y la ciudad han descubierto su verdadero rostro, y las alternativas se fortalecen. Para encarar la transición hacia otro modelo agroalimentario y agroindustrial el camino es la agroecología.

Florecer

El Mes de la Agroecología busca impulsar la realización de eventos de visibilización, reflexión y debate desde cada una de las vertientes del paradigma: ciencia, práctica y movimiento, abarcando a las distintas producciones, escalas y diversidad de actores y territorios.

En su séptima edición, en 2021, se realizaron más de 200 eventos en 20 provincias: visitas a establecimientos agroecológicos, ferias, charlas, capacitaciones, actividades culturales, con modalidad virtual y presencial. Para este 2022, aún antes de concretado el lanzamiento oficial, ya hay más de 70 actividades programadas en todo el país, y es de esperar que supere al logro de 2021. 

Durante el lanzamiento tomaron la palabra compañeros y compañeras de cada una de las instituciones convocantes:

Marcelo Schwerdt, presidente de la RENAMA recordó el comienzo “desde haber arrancado en el 2015 con poquitas actividades, a lo que pasó el año pasado con más de 200, y este año que en la previa ya tenemos más de 70; esto no hace más que constatar que la agroecología es hoy una realidad, una demanda cada vez más creciente, que podemos medirla en cualquier orden: en educación, en grupos de productores, de ingenieros, en las diplomaturas y carreras que se van generando. Invitamos a que se sumen desde cada lugar, con pequeñas acciones, con lo que se pueda, todo vale, todo motiva y todo contribuye a que la agroecología siga creciendo día a día”.

También por la RENAMA, Marisa Fogante destacó que este “es el momento de la acción colectiva”, y que la multiplicidad de eventos señala un tiempo de colaboración, sin competencias, fortaleciendo alianzas para levantar demandas y cuestionamientos colectivos, con énfasis en el enfoque agroecológico como paradigma y “marcando todos esos faros en todo el país, porque no hay agroecología sin agricultores y agricultoras haciéndola”.

Por la Sociedad Argentina de Agroecología (SAAE) tomaron la palabra Claudia Flores y su presidente Santiago Sarandón, para quién “esto que estamos viendo es producto de muchos años y mucha gente que fue sembrando, y estamos viendo ese fruto. Esto no sería posible sin la historia que hubo y para muchos de nosotros este momento superó nuestras expectativas. Creemos que algo tiene la agroecología, y tenemos esta oportunidad de mostrar que es viable, real y mucho mejor. Es exponencial lo que está ocurriendo, esta explosión de experiencias donde la academia, los agricultores, todos juntos estamos viendo esta posibilidad. Algo que caracteriza a la agroecología es la alegría y el entusiasmo y yo creo que hemos recuperado algo esencial para todos nosotros, que estaba ocultos y por eso es que la agroecología contagia, y esto se va a ver durante este mes”.

Patricio Dowbley, Director de Sistemas Productivos Alternativos de la Subsecretaría de Agricultura Familiar Campesina e Indígena (SAFCI), trajo el saludo de Miguel Gómez a cargo de la Subsecretaría, y de Yanina Settembrino y Hernán Rachid. Destacó el espíritu movimientista de la convocatoria, “venimos y vamos hacia los movimientos”, rescatando el trabajo de cientos de técnicos y técnicas de la SAFCI en todo el país “que día a día también están construyendo la agroecología, junto con los productores y productoras de la agricultura familiar”.

Luis Caballero, Gerente de Articulación Interinstitucional del INTA: “estoy muy contento de estar compartiendo este lanzamiento con toda esta gente linda con quienes hace muchos años compartimos y nos acompañamos en este camino de la agroecología y no solo a nivel de personas, sino a nivel de instituciones (…) Desde hace varios años trabajamos para que vaya creciendo la agroecología dentro del INTA. Se ha creado ya un tiempo la Red de Agroecología (REDAE) que reúne investigadores de distintos lugares del país, y en el ámbito de extensión tenemos casi 1300 extensionistas en 357 oficinas de extensión en todo el país, y esos compañeros extensionistas que trabajan en territorio, con los productores, en la realidad cotidiana y cercana, muchas veces hacen agroecología, son militantes comprometidos con este paradigma, aún cuando la misma institución no los reconozca como tal”. 

Diego Velardoccio, Director del Programa Cambio Rural: “El año pasado, cuando participamos por primera vez del mes de la agroecología, teníamos 16 grupos agroecológicos, todos ellos concentrados en la provincia de Buenos Aires, todos ellos alrededor de la de la Chacra Barrow donde el INTA alojaba quizás la mayor experiencia respecto a la agroecología, y hoy tenemos 132 grupos en todo el país, en casi todas las provincias y en todas las macro regiones. Este proceso nos ha enriquecido, y nos parece que somos un mejor programa”.

Eduardo Cerdá, Director Nacional de Agroecología

“Hoy nos encontrarnos acá con todos los que nos acompañan, que es una red de confianza, de amistad, en esto que tanto cuesta: poder articular, tejer. Lo inició la RENAMA a partir de esa gran bondad de Juan Kiehr de La Aurora, y después aparecieron muchas auroras y más actores. Mañana (20/10) estamos lanzando el Nodo Agroecológico Territorial de Jujuy, y vamos a terminar el mes desde Misiones”.

“Ojalá que todos sigamos construyendo esto que tiene que ver con lo que necesitamos como comunidad: tejer lazos de confianza y articularnos para que se haga todo más fácil. Entendemos lo lindo de la complejidad que propone la agroecología, y esto no quiere decir que sea complicado. Es complejo, porque la vida es compleja y lo tenemos que entender así, y para que sea posible, la clave es encontrarnos y potenciarnos”.

Acá podés repasar la agenda de actividades y sumar eventos al Mes de la Agroecología.

Fuente: Huerquen