Protesta, marco de Carrera de la Tortilla
Habitantes se inconforman ante el patrocinio de Maseca y el presunto trato que le dieron autoridades a las vendedoras de este producto
La tradicional Carrera de la Tortilla de la junta auxiliar de Santa María Coapan, que desde el año pasado es Patrimonio Cultural del municipio de Tehuacán, se vio ensombrecida porque de forma previa habitantes marcharon para expresar su rechazo a que el evento sea patrocinado por la empresa Maseca.
No obstante, la protesta también fue por el trato violento que se dio a las vendedoras de tortillas por parte de las autoridades municipales para evitar que se colocaran en el primer cuadro de la ciudad para comercializar sus productos.
Los inconformes, entre vendedoras y molineros, realizaron una marcha pacífica desde un costado del Palacio Municipal de Tehuacán hasta el monumento a la Coapeñita, portando pancartas con lemas como: “Exigimos respeto al trabajo de las mujeres indígenas”, “Nuestra marcha es para la dignificación de todas las mujeres trabajadoras”, “Las autoridades vendieron nuestra tradición y cultura”, “¡No a la Maseca! ¡No al maíz transgénico!, “Sí a la soberanía alimentaria”, entre otras.
Asimismo, con gritos de consigna enfatizaron “nuestra dignidad no se vende, se vive y se defiende”. Además señalaron que el movimiento que iniciaron, denominado “tortilla limpia”, es para dejar en claro que la elaboración de este producto es 100 por ciento de maíz y no harina.
Agregaron que la persecución por parte de las autoridades para evitar que comercialicen sus tortillas en la vía pública y ahora lo tengan que hacer en los pasillos del mercado 16 de Marzo, ha ocasionado que sus ventas se desplomaran en un 70 por ciento.
El presidente subalterno, Miguel Ángel Flores Albino, lamentó que se diera la inconformidad en el evento, que trata de exaltar las tradiciones y costumbres de la comunidad.
Sin embargo, entiende que existe molestia entre los habitantes por el actuar de las autoridades municipales, pero señaló que son expresiones libres y están en su derecho de hacerlas.
En cuanto al patrocinio de la empresa Maseca, manifestó que se aceptó con la finalidad de que las competidoras tuvieran una mejor premiación, esto sin comprometer la esencia de este evento.
Puntualizó que el compromiso con Maseca solo fue que aportara el recurso económico de los tres primeros lugares y otros aditamentos para las participantes, por ello las habitantes seguirán utilizando el maíz tradicional para la elaboración de tortillas.
La carrera
Tras la manifestación se desarrolló la edición 26 de la Carrera de la Tortilla, con la participación de 330 competidoras en las cinco categorías, 120 más que el año pasado, cuando sólo se suscitaron dos incidentes menores, pues dos coapeñitas durante el trayecto se tropezaron y cayeron al piso.
La carrera dio inició a un costado del Palacio Municipal de Tehuacán para después, las participantes, recorrer una distancia de 4.5 kilómetros para llegar a la explanada de la junta auxiliar de Santa María Coapan, portando vestimentas típicas, mientras en su espalda cargaban, con un rebozo, su tenate con 3 o 5 kilogramos de tortilla, dependiendo de su categoría.
El presidente auxiliar de Santa María Coapan manifestó que el evento, que formó también parte de la Cuarta Edición del Festival del Maíz, contó con la participación de representantes del gobierno del estado para dar fe de las actividades y así poder complementar el expediente para logar que la carrera sea nombrada Patrimonio Cultural del Estado.
SGG, sin quejas por maltrato
La subsecretaría de Atención a Pueblos Indígenas de la Secretaría General de Gobierno (SGG) del estado, no tiene ninguna queja formal sobre el maltrato que sufrieron las vendedoras de tortillas de Santa María Coapan, conocidascomo coapeñitas, al ser detenidas por elementos de la Policía Municipal al intentar vender sus productos en la vía pública, indicó sus titular, Socorro Figueroa.
Pese a que en redes sociales se viralizó hace meses un video donde policíasdetienen a una mujer por vender sus tortillas en la calle, lo que no está permitido, la instancia no tiene conocimiento de la situación.
A decir de la subsecretaría, si se vulneraron los derechos de estas personas es un tema que compete en primera instancia al municipio y la injerencia que podría tener esta dependencia sólo se daría en el caso de que exista una queja o un escrito pidiendo su intervención, hecho que no ocurrió.
Fuente: El Popular