Programa del Pentágono promueve guerra psicofarmacológica

Con base en "la revisión extensiva de la literatura médica y nuevos desarrollos de la industria farmacéutica" el informe concluye que "el desarrollo y uso [de armas psicofarmacológicas] es posible y deseable". Estas armas alteradoras de la mente violan los convenios internacionales sobre armas químicas y biológicas, al igual que los de derechos humanos. Algunas de las técnicas discutidas en el informe ya han sido usadas por EE.UU. en la "Guerra contra el Terrorismo".

El equipo, cuya base es el Laboratorio de Investigación Aplicada de la Pennsylvania State University, está evaluando la conversión de un grupo de fármacos psiquiátricos y anestésicos, al igual que "drogas recreativas" (tales como la "droga para la violación en citas" GHB) en armas. Según el informe, "la ruta escogida de administración, ya sea agua potable, administración tópica en la piel, ruta de inhalación mediante aerosol, bala plástica rellena con droga, entre otros, dependerá del entorno". Los entornos identificados son situaciones militares y civiles específicas, entre ellas "refugiados hambrientos que están agitados por la distribución de alimentos", "en una prisión", "un grupo de personas agitadas", y "casos con rehenes". En ocasiones, el informe del equipo del JNLWP llega casi al extremo de definir disenso como una enfermedad psicológica.

Las drogas que Lem denomina "benignizantes" son llamadas "calmantes" por el ejército. Algunos de estos calmantes, como BZ, fueron convertidos en armas por adversarios de la Guerra Fría, descrito por quienes lo han usado como "peor viaje". Los calmantes debieron haber sido eliminados de los arsenales militares tras la adopción de la Convención de Armas Químicas en 1993, la cual prohíbe cualquier arma química capaz de causar muerte, incapacidad temporal y daño permanente a humanos o plantas.

Calmante es una terminología militar, no médica. Dentro de un lenguaje médico más familiar, la mayoría de drogas bajo consideración son depresores del sistema nervioso central. La mayoría son sintéticas, algunas son naturales. Éstas incluyen opioides (drogas tipo morfina) y benzodiazepinas, como Valium (diazepan). Al equipo investigativo también le interesan los antidepresivos, y está buscando drogas como Prozac (fluoxetina) y Zoloft (sertralina) que actúan rápidamente.

Bioquímicos y Tratados: Muchas de las drogas propuestas pueden considerarse armas químicas y biológicas prohibidas por la Convención sobre Armas Biológicas y Toxínicas (CABT) y la Convención sobre Armas Químicas (CAQ). Por razones prácticas, los calmantes químicos y biológicos deben ser abordados conjuntamente. Por tratarse de agentes específicamente destinados para uso militar y que buscan incapacitar sus víctimas, no caben dentro de la excepción de la Convención de Armas Químicas de uso doméstico para control de motines. Los productos tóxicos con agentes vivos –como la neurotoxina butolínica- son considerados tanto agentes químicos como biológicos. Cualquier uso de neurotransmisores o substancias que imiten su acción como armas está cobijado por las dos convenciones de control de armas. Los investigadores han elaborado una base de datos de calmantes inmensa y le hacen seguimiento a la investigación biomédica en adicción de drogas, alivio del dolor, y otras áreas de investigación en bioquímicos que alternan la cognición. Por ejemplo, el equipo JNLWP está haciendo seguimiento a la investigación en colecistoquinina, un neurotransmisor que ocasiona ataques de pánico en personas sanas y que está asociado a trastornos psiquiátricos.

Drogas poderosas: Las drogas tienen efectos alucinógenos y otros adicionales, como apnea (pausa en la respiración), coma y muerte. Una clase de drogas bajo consideración son los fentaniles. La carátula del informe contiene el diagrama del fentanil. Según la agencia estadounidense para el control de drogas (DEA por sus siglas en inglés), los efectos biológicos de los fentaniles "no se diferencian de aquellos de la heroína, con la excepción que los fentaniles son cientos de veces más potentes", El informe dice que los efectos profundos de la droga harían necesario "estar pendientes de aquella persona que pudiese dejar de respirar (muchas razones médicas en las personas enfermas, los ancianos y los muy jóvenes..." así como las víctimas que "se queden ‘dormidas’ en posiciones que obstruyan sus vías respiratorias".

Drogas frustradas: El informe sostiene que candidatos farmacéuticos que fracasan por los efectos colaterales excesivos pueden ser deseables para usarlos como armas: "A menudo, un efecto colateral indeseado... dará por terminado el desarrollo de un promisorio compuesto farmacéutico nuevo. Sin embargo, en la variedad de situaciones en las que técnicas no letales son usadas, puede que haya menos necesidad de preocuparse de los efectos colaterales molestos... Tal vez, el calmante ideal ya ha sido sintetizado y está esperando el interés renovado por parte de su productor."

Cócteles químicos: Según información de marzo de 2002, el equipo estaba trabajando en una mezcla de gas pimienta (OC) y un agente calmante no identificado. El gas pimienta es el agente químico de control de motines mas potente en uso y ha sido asociado a numerosas muertes. Agregar un calmante al OC resultaría en una horrorosa invención. El informe concede prioridad a Valium y Precedex (dexmedetomidina) para convertirlos en armas y es posible que éstos sean los agentes que podrían ser mezclados con OC. Los investigadores también recomiendan mezclar ketamina con otras drogas (ver abajo). Las propuestas de cóctel químico se asemejan a la investigación de armas de Sudáfrica en la era del apartheid, cuyo director admitió bajo juramento haber tratado de producir una mezcla de cocaína y BZ para usarla contra los enemigos del gobierno.

Tortura: Precedex es un sedante aprobado en Estados Unidos para uso en pacientes en unidades de cuidado intensivo. El informe saca a relucir "un fenómeno interesante" relacionado con el uso de Precedex: la droga incrementa la reacción de los pacientes a los choques eléctricos. Los investigadores sugieren sensibilizar a la gente usando Precedex, y continuar con el uso de armas electromagnéticas para "abordar los efectos de aquellos pocos individuos en los cuales la dosis promedio del agente farmacológico no produjo el efecto deseado". Obviamente, una técnica así puede considerarse tortura e indudablemente puede usarse para torturar. Para adicionar a las propiedades hipnóticas y delirantes, los investigadores sugieren diseñar agentes psicofarmacológicos que además tengan efectos físicos, como dolor de cabeza y náusea, aumentando su potencial para torturar.

Los investigadores sugieren que parches transdérmicos y formulación transmucosal (a través de las membranas mucosas) de Buspar (buspirona) -actualmente en etapa de desarrollo por Bristol-Myers Squibb y TheraTech, Inc- "serían efectivos en prisiones cuando hubiese un incidente reciente que provoque ansiedad o confrontación".

Uso en la Guerra contra Terrorismo: Obviamente, es muy poco probable que prisioneros poco dispuestos a cooperar o revoltosos acepten ser drogados con un parche o mediante la mayoría de los mecanismos convencionales. En esos casos, probablemente la aplicación de calmantes se haría sobre individuos en grilletes o camisas de fuerza. EE.UU. ha admitido que ha sedado por la fuerza a los "detenidos" de Al-Qaida, recluidos en la base estadounidense de Guantánamo, Cuba. El ex director del programa conjunto de armas no letales, coronel en retiro Andy Mazzara, que dirige el equipo de la Pennsylvania State University, dice que ha enviado un "Consejero Científico" a la armada de EE.UU. para ayudar en la Guerra contra Terrorismo.

Modos de Administración: El estudio aborda un sinnúmero de modos de producción de armas. Estos incluyen aerosoles, microencapsulación, y métodos insidiosos tales como la introducción en los depósitos de agua potable y goma de mascar psicoactiva. El JNLWP está invirtiendo en el desarrollo de la tecnología de microencapsulación, que incluye la producción de gránulos con una cantidad diminuta de un agente, revestidos con un cartucho duro. Al distribuirse en tierra, los cartuchos se rompen al ser pisados y el agente se libera. Un nuevo tiro de mortero capaz de lanzar miles de gránulos diminutos por tiro está siendo desarrollado. El equipo concluye que nuevos mecanismos de administración bajo desarrollo por la industria farmacéutica serán de gran valor para la producción de armas. Entre estos se cuentan nuevos métodos de administración transdérmica, transmucosa y aerosoles. El informe cita la relevancia de una paleta que contiene fentanil para el tratamiento de niños con dolor severo y señala que "el desarrollo de nuevas drogas opiodes para aliviar el dolor capaces de ser administradas por varias rutas está a la vanguardia de los descubrimientos de drogas", concluyendo que se podría desarrollar nuevas armas a partir de esta investigación farmacéutica.

Pistolas de dardos: Los investigadores expresan interés específico en disparar a humanos con pistolas cargadas de dardos de carfetanil. Carfetanil es un narcótico veterinario que se usa para tranquilizar animales grandes y peligrosos, tales como osos y tigres. Cualquier persona que haya visto programas de vida silvestre en televisión está familiarizada con dicho procedimiento. En Estados Unidos, carfetanil no está aprobado para ningún uso en seres humanos. Es una droga abusada y una sustancia sujeta a control. Bajo la ley de EE.UU., quienes sean condenados por primera vez por posesión no autorizada de carfetanil pueden ser castigados con hasta 20 años de prisión y multa de US$1 millón.

Drogas Recreativas: La mayoría de los candidatos del JNLWP son substancias sujetas a control en la mayoría de países. Algunos son fármacos legítimos ampliamente usados que también son drogas abusadas, como Valium y los opioides. El equipo del Pentágono recomienda mayor investigación en el potencial como armas de los convulsionantes (que provocan ataques) y "drogas recreativas", aquellas substancias ilícitas que se usan en algunos clubes nocturnos y clubes de parrandas ("rave"). Dentro de las drogas en la mira de los militares figuran la ketamina (o Special K), el éxtasis líquido (GHB gamma-hidroxibutirato) y el Rohypnol ("roofies"). Los dos últimos en particular, se conocen como las "drogas para la violación en citas", debido a la incidencia de su uso en víctimas de delitos sexuales y otros delitos. La mayoría de estos narcóticos pertenecen a las categorías I o II de la DEA, provocan alucinaciones y pueden dar lugar una sanción de cadena perpetua. Por ejemplo, según la DEA, "el uso de la ketamina como anestésico general en humanos ha sido limitado debido a los efectos negativos como delirio y alucinaciones... dosis bajas producen vértigo, ataxia, dificultad al hablar, reacción retardada y euforia. Dosis intermedias provocan pensamiento desorganizado, alteración en la imagen corporal, sensación de irrealidad con alucinaciones visuales vívidas. Altas dosis producen analgesia, amnesia y coma."

Acción: El Sunshine Project está haciendo un llamado para que inmediatamente se de por terminado este trabajo y urge a las Partes, tanto de la Convención de Armas Químicas como de la Convención sobre Armas Biológicas, para que rápidamente condenen esta investigación y aprueben resoluciones reiterando la prohibición de estas armas. Dentro de la Convención de Armas Químicas, oportunidades para actuar surgirán durante la Conferencia de los Estados Parte, que reunirá en La Haya a partir del 7 de octubre de este año, y en la Primera Conferencia de Examen de la Convención de Armas Químicas, que empezará el 28 de abril de 2003. Para la Convención sobre Armas Biológicas, los estados Partes deberían formular propuestas durante la V Conferencia de Examen, que comenzará en Ginebra en noviembre, y deberían colocar los "calmantes" biológicos y toxínicos en la agenda de la próxima Conferencia de las Partes o de cualquier otro grupo multilateral que se cree en dicha conferencia.

Este comunicado de prensa es el primer informe sobre este programa alarmante. Más adelante se emitirá más información sobre la relación de estas armas y la protección de derechos humanos, ética médica e investigación en drogas. Un resumen del informe está disponible en el portal de Internet del Sunshine Project ( www.sunshine-project.org).