Piden atender contaminación de 19 mil personas expuestas a metales pesados
Una demanda constitucional de amparo para que el Estado atienda la situación de 19 mil huancavelicanos afectados por la presencia de plomo, mercurio y arsénico fue presentada esta semana.
Se trata de tres de los metales más tóxicos para salud humana presentes en la ciudad de Huancavelica, creada a los pies de la mina Santa Bárbara, y que daña silenciosamente la vida de sus ciudadanos.
La demanda presentada por la Asociación Nuevavelica pide al Estado peruano declarar en emergencia esta ciudad y desarrollar acciones que mejoren la calidad ambiental.
La acción de amparo alcanza a la Presidencia de Consejo de Ministros, al Ministerio de Ambiente, al Ministerio de Energía y Minas y al Ministerio de Vivienda, Construcción y Saneamiento.
Ciudad que convive con metales tóxicos
En 2016 el Organismo de Evaluación y Fiscalización Ambiental (OEFA) analizó el aire de los espacios públicos de la ciudad y los resultados fueron aterradores.
Las muestras indicaron que el 91.6 % del aire superaba los niveles máximos de arsénico que establece la legislación peruana; mientras que el 81.3 % sobrepasaba los niveles de mercurio y el 47,9 % los de plomo.
El OEFA también advirtió que el agua del río Ichu, que atraviesa Huancavelica, se encuentra también contaminada por los mismos metales y que no es apta para el riego ni el consumo animal.
Otro estudio reveló que ocho de nueve patios de colegios estatales analizados presentaron excesivos niveles de metales pesados.
Ciudad de Huancavelica. Foto: Gran Angular
Derecho a vivir en un ambiente sano
José Ecos, médico en la ciudad de Huancavelica, consideró que no es necesario que existan personas afectadas para declarar una emergencia sanitaria; basta con ver las muestras ambientales para saber que los huancavelicanos viven en un ambiente enfermo.
“La demanda no solo es humana, sino también justa”, añadió Ecos.
Por su parte, el Consejo de Salud Ambiental determinó en un estudio que el 75 % de las casas de barro estaban por encima de los niveles máximos permisibles de mercurio. La concentración de este metal provoca vapores tóxicos que son inhalados por niños, adultos y ancianos.
“El 85 % del vapor que se inhala queda en el organismo”, alertó el investigador Nicholas Robins, quien también señaló que muchas de las casas de adobe han sido construidas con antiguos desechos de la mina Santa Bárbara.
Foto: El Gran Angular
El investigador denunció que desde hace tres años se exige al Gobierno gestionar medidas que ayuden a resolver y enfrentar esta situación que genera efectos negativos en la salud de las personas.
Recién en julio de 2020, el Estado formó una comisión especial para elaborar una propuesta de atención estatal a favor de la población expuesta a metales pesados.
La demanda judicial responde a la inacción de las autoridades locales, regionales y centrales. Desde hace cuatro años, el Estado sabe que en la ciudad de Huancavelica los niveles de mercurio, arsénico y plomo exceden los límites máximos permisibles.
“Los huancavelicanos tienen el derecho de exigir un ambiente sano. Por eso, solicitan al Poder Judicial que atiendan sus derechos fundamentales, así como sus necesidades de vivienda”, explicó José Ramiro abogado representante de la Asociación Nuevavelica.
Fuente: Servindi