Paraguay: convierten en desierto un esteral para cultivar soja, en Artigas

Idioma Español
País Paraguay

Pobladores del distrito de General Artigas, Dpto. de Itapúa, denunciaron que un extenso humedal de aproximadamente 20 mil hectáreas está siendo secado por agroexportadores brasileños para la explotación comercial de cultivos de soja, lo que provoca “daños a los humedales y desequilibrios ecológicos al medio ambiente”.

Responsabilizan de la situación a los ciudadanos brasileños Celso Targanski, Genesio Targanski y Clemente Buzanelo.

Esta zona donde predominaba el agua se está convirtiendo en desierto fabricado por grandes máquinas manejadas por el hombre, ubicado a unos 17 kilómetros del casco urbano de General Artigas, en el humedal conocido como Pirity, en la zona de nacimiento del arroyo Aguapey, que desemboca en el río Paraná.

Las políticas de intensificación de la agricultura y su impacto sobre los humedales no son nuevos, han sido y es la principal amenaza para estos ecosistemas.

Lo grave es que su desecación para la ampliación de los cultivos, y la posterior contaminación por pesticidas y fertilizantes cuenten con licencia ambiental de la Secretaría del Ambiente (Seam) según Jorge Barboza, funcionario de la Municipalidad de General Artigas.

En estos momentos, grandes máquinas rodeadas de una nube de polvo canalizan los humedales para escurrir el agua y permitir la operación de maquinarias agrícolas, previa fertilización de estas tierras con cal agrícola.

La denuncia fue formulada por lugareños que ven impotentes cómo va desapareciendo un bien tan preciado como el agua y la fauna autóctona del humedal, a raíz del secado de las inmensas aguadas y esteros que dominaban la zona.

Las tareas de secado involucran a los ciudadanos brasileños Celso Targanski, Genesio Targanski y Clemente Buzanelo. Este último era dueño de una de las estancias en la que ahora se realizan los trabajos de terraplenado que están dañando seriamente el equilibrio ecológico.

Debido a la gran infraestructura en maquinarias utilizadas para el efecto, es posible observar cómo ha cambiado rápidamente la topografía del lugar, en donde el mínimo viento levanta una finísima polvareda de arena.

Incluso al salir de la zona urbana de General Artigas se puede apreciar el impacto que ha generado la deforestación de árboles nativos que aún quedaban, transformando estos suelos para la actividad agrícola, en los que trabajadores están esparciendo cal agrícola para posteriormente proceder a la siembra de soja que comenzará el próximo mes.

Fuente: ADN Paraguayo

Temas: Agronegocio

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