Panamá: "¿Dónde está la garantía de que no habrá embalses?"
Coordinadora Campesina Contra los Embalses: "Somos gente que nos cuesta mucho sobrevivir con toda la exclusión a que nos han sometido los gobiernos, para desperdiciar nuestro valioso tiempo en giras a la ciudad de Panamá, solicitando sin respuesta la atención de las autoridades. Por esa razón, el objetivo primordial de nuestra lucha es recuperar nuestras tierras y no descansaremos hasta lograrlo"
Después de seis años de lucha y denuncias constantes por la forma como la Autoridad del Canal de Panamá (ACP) a través de su junta directiva, ha llevado el tema de la ampliación del Canal de una manera inconsulta y sin transparencia, recurrimos a facultad, con pleno derecho, de exigir que se repare y discuta una nueva delimitación de lo que hoy está contemplado dentro de la Ley 44 del 31 de agosto de 1999, en donde nos quitaron 213,112 hectáreas mal llamada cuenca occidental del Canal.
Las actas oficiales que reposan en la Asamblea Legislativa donde está plasmado la discusión y sustentación de esta Ley por el reelecto administrador de la ACP (A. Zubieta) son la prueba contundente del porqué nosotros los campesinos y campesinas que vivimos en esta mal llamada cuenca occidental, nos hemos opuesto desde los inicios al proyecto de ampliación del Canal. Ahí Zubieta mencionó detalles técnicos sobre los tres lagos artificiales que se crearían en los ríos Indio, Coclé del Norte y Caño Sucio y claramente expresó que las personas que viven ahí tendrían que ser reubicadas. Esto demuestra que nuestro temor a ser desplazados no es resultado de nuestra imaginación. Somos gente que nos cuesta mucho sobrevivir con toda la exclusión a que nos han sometido los gobiernos, para desperdiciar nuestro valioso tiempo en giras a la ciudad de Panamá, solicitando sin respuesta la atención de las autoridades. Por esa razón, el objetivo primordial de nuestra lucha es recuperar nuestras tierras y no descansaremos hasta lograrlo.
Hacemos un llamado de atención:
1. Al Tribunal Electoral por olvidar nuestras peticiones de un referéndum limpio y transparente. Al contrario está adelantando trabajos sobre el referéndum, cuando el primer paso es que la Junta Directiva de la ACP apruebe los estudios, se los presente al Órgano Ejecutivo y éste a su vez a la Asamblea. Sólo entonces la Asamblea puede discutir el tema y sólo después tendría que hablar el Tribunal Electoral. Rechazamos rotundamente las declaraciones a medios de prensa donde el Tribunal Electoral anuncia preparativos, el voto electrónico y la eliminación de 1,000 mesas de votación. Si la decisión sobre el Canal debe ser de todos, se debe promover que los panameños tengamos la facilidad para ejercer el derecho y deber ciudadano de votar.
2. A la ACP por tratar de confundir a la población campesina afectada y al resto del país. No han podido responder responsablemente sobre nuestras tierras, cuánto costará y quien pagará el proyecto. En las últimas intervenciones de funcionarios de la ACP, manifiestan que no hay necesidad de hacer embalses y que el país no se endeudará, sino que los costos serán cubiertos por el Canal y sus reservas. Entonces ¿de quién es el Canal?, ¿para qué insistir en mantener nuestras tierras como cuenca?
3. Al presidente Martín Torrijos y el resto del órgano ejecutivo para que demuestren con hechos el compromiso manifestado recientemente en el consejo consultivo en la provincia de Colón, de ser garantes de los derechos de los campesinos para que nadie fuera movilizado de sus tierras. Los hechos se demuestran con voluntad política para revisar la Ley 44 y hacer los cambios que garanticen que estas tierras, de la mal llamada cuenca occidental, vuelvan a manos de sus legítimos dueños, sin la jurisdicción de la ACP. Solamente así podríamos descansar y poder llevar a cabo un amplio, limpio y transparente debate del proyecto de ampliación, para que los panameños tomemos una decisión responsable en bien del desarrollo nacional.
El reto es el siguiente: de no existir embalses, como ahora dicen los de la ACP, devuelvan nuestras tierras y eliminen las tres concesiones hidroeléctricas que otorgó el Ente Regulador a la ACP desde el mes de noviembre de 1999 para represar nuestros ríos. De lo contrario, las intenciones de hacer los embalses se mantendrán y todos los panameños, no sólo los campesinos, deberíamos votar No, en el referéndum.
Comisión de Información y Seguimiento, Diciembre 2005
Fuente: Pastoral Social-Cáritas Panamá