Ferias Francas de Misiones: alimentos directo de los productores para contrarrestar la inflación

Idioma Español
País Argentina
Foto: agrifam.misiones.gob.ar

Como contracara de la decisión del gobierno nacional de debilitar a la agricultura familiar, las históricas ferias de Posadas ofrecen alimentos de productores campesinos a precios justos. El novedoso Índice de Precios de Ferias Francas (IFF) demuestra que estos canales de comercialización permiten obtener canastas de alimentos a precios promedio inferiores a los del mercado convencional.

Por Sergio Alvez
Desde Misiones

Las Ferias Francas de la ciudad de Posadas son una política pública, impulsada desde el movimiento campesino, con 25 años de vida. Estos espacios permiten la comercialización entre productores de la agricultura familiar y consumidores con la consigna “de la chacra a la mesa familiar”, con productos frescos y agroecológicos que generan arraigo y trabajo local. A través del Índice de Precios de Ferias Francas (IPFF), elaborado por el Instituto Provincial de Estadística y Censos (IPEC) de Misiones, se puede probar cómo la economía social funciona como un colchón contracíclico frente al incremento de precios de los alimentos. En la comparación interanual, los precios de las Ferias Francas están un 20 por ciento por debajo de los de mercado.

Si bien la suba de precios acumulada en las ferias francas desde diciembre (79,2 por ciento) fue casi igual al medido por el Índice de Precios al Consumidor (IPC) del Indec, medido en supermercados y almacenes, en la región Noreste (79,1 por ciento); las ferias posadeñas fueron un claro resguardo para el bolsillo de los consumidores entre febrero y mayo, tras la corrida inflacionaria posterior a la devaluación. En ese período, el aumento de precios en las ferias fue del 19,3 por ciento, cuando el IPC mostró un incremento del 25,2 por ciento en los mercados comerciales de la región. En junio, los precios en las ferias francas marcaron un quiebre con un aumento del 10,3 por ciento, mientras que el Indec arrojó un 4,4 por ciento para la región. 

El director de Metodología del IPEC, Darío Díaz, explica que "hasta junio, la brecha de incremento de precios entre el IPC-NEA y el IPFF era de más del 50 por ciento; ahora lo que ocurrió  fue una corrección al alza de los precios de las  Ferias Francas". El IPFF comenzó a ser publicado en octubre de 2023, pero Díaz destaca que cuentan con la serie de datos anteriores que les permiten realizar una medición interanual, en la que "los precios de la Feria Franca crecieron 20 puntos por debajo del IPC-NEA”.

“Una de las cuestiones que siempre tenemos presentes los feriantes es tratar de cuidar al máximo el bolsillo de los clientes, mucho más en estos tiempos en los que cuesta tanto llevar el alimento a la mesa. Aunque a nosotros también nos aumenta el combustible, el aceite, la luz y todo en general, tratamos de mantener precios justos”, señala Lucía Ferreyra, feriante oriunda de la localidad de Corpus, en diálogo con Tierra Viva, desde su puesto en la pionera feria franca de Villa Cabello. Esa dinámica de la economía social funciona de forma contracíclica ante el aumento de precios.

A las ferias francas con calculadora en mano

La red de Ferias Francas reúne a 423 feriantes —productores oriundos de diferentes municipios de la provincia— distribuidos en once ferias permanentes, que se montan cada fin de semana; a las que se suman sedes alternativas en organismos públicos y clubes de barrio para ampliar a 32 puntos los puntos de comercialización. 

El desarrollo del IPEC permite obtener información para comparar los precios de las Ferias Francas de Posadas frente a los supermercados y almacenes. Todos los sábados y domingos, cinco encuestadores, un supervisor y dos coordinadoras relevan los precios de 82 feriantes distribuidos en las once ferias permanentes. Además del IPEC, la Municipalidad de Posadas también se involucra en el operativo, a través de la Dirección General de Producción y Ferias Francas, de la Secretaría de Desarrollo Económico.

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El IFF se realiza sobre los valores de 24 alimentos similares entre ferias francas, supermercados y almacenes. Los productos incluidos en la medición abarcan frutas, verduras, lácteos, carnes, panificados, cereales y envasados varios. Además de informar el número global mes a mes, el IPEC también ofrece una  calculadora de precios online, que permite simular compras y contraponer los precios de las ferias y los comercios convencionales. 

Desde que el IPFF empezó a implementarse, las diferencias de precios en favor de las Ferias Francas alcanzaron su mayor diferencia en el mes de marzo. En ese momento, la diferencia de precios de los productores de la agricultura familiar y lo ofrecido en la góndola de los supermercados fue notable: pomelo (87 por ciento); acelga (75 por ciento); limón (66 por ciento), naranja (57 por ciento), miel (57 por ciento); y banana (57 por ciento).

Por el contrario, productos como el pollo y la mandioca presentan una diferencia porcentual de precios a favor de los comercios convencionales. En el caso del pollo entero, por un 45 por ciento y en mandioca por un 10 por ciento.

A pesar de las cifras de junio, el simulador del IPEC arrojaba una marcada diferencia en los precios promedio para un consumidor que realizara sus compras en las Ferias Francas. Por ejemplo, un persona que comprara una docena de naranjas y limones, un kilo de bananas, zapallo criollo, zapallitos y batata, y un atado de acelga; si luego pasara por la carnicería y llevara un kilo de falda y chorizo de cerdo, un pollo y siguiera con una docena de huevos, un kilo de yerba y un kilo de queso; compraría un 47 por ciento más barato que en un supermercado.

“Si bien el cliente de las ferias siempre fue fiel, notamos en estos últimos meses la llegada de nuevos clientes en busca de productos específicos como la miel. También de otras personas que solían comprar verduras y frutas en supermercados o verdulerías, pero que ante los aumentos ahora nos eligen”, aporta Jorge Potrowski, agricultor de la localidad de Mártires, en diálogo con Tierra Viva.

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Precios justos, entre el mercado y las políticas públicas

La Ley Provincial de Desarrollo, Promoción y Fomento de la Feria Franca y Mercado Zonal Concentrador de Ferias Francas habilita a los feriantes a comercializar únicamente de manera directa su producción, lo que garantiza producción fresca y sin intermediarios. Además, el Consejo Asesor de Ferias Francas (CAFF) realiza un permanente acompañamiento a feriantes  y monitoreo en las chacras productoras para garantizar la salubridad de los productos que se comercializan en las ferias.

Según el Consejo Asesor, los productos que se ofrecen en las Ferias Francas no presentan procesos químicos que por lo general sí poseen las ofertas industrializadas. Cabe destacar también que, a partir de la Ley de Fomento a la Producción Agroecológica, reglamentada en 2020, la provincia avanza en un Sistema Participativo de Certificación, que ya completaron doce chacras, mientras otras 80 están en transición.

Además, a diferencia de los comercios convencionales y a instancias de la legislación provincial, las Ferias Francas están exentas del pago de impuestos provinciales y municipales. Constituidas como una institución dentro de la economía social regional, las Ferias cuentan con otros incentivos por parte del Estado Provincial, como ser la asistencia técnica a través del Ministerio de Agricultura Familiar, líneas crediticias para pequeños productores y una línea de ayuda social basada en un sistema de tickets para que los beneficiarios retiren productos en estos espacios de comercialización.

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De todas maneras, los productores de la agricultura familiar no están exentos de otras variantes de la producción y del mercado que imponen la conformación de los precios. El productor Mario Rabaski, del municipio sureño de Cerro Corá, explica a Tierra Viva que “un factor fundamental es la estacionalidad”.

Esto significa que la incidencia resulta directa en el precio, si el producto en cuestión se encuentra en su etapa de cosecha o plantación. “Por ejemplo, cuando estamos en la época de cosecha de paltas o frutillas, los precios bajan porque tenemos abundancia. Ahora tenemos buena cosecha de mandarina y por eso está barata. Pero recién comenzamos a plantar maíz, zapallito y pepino. Entonces esas verduras hoy son caras”, detalla.

Otras variables importantes atañen a los costos energéticos, especialmente el combustible y la energía eléctrica. “Los productores nos trasladamos a Posadas en nuestros vehículos. Cada vez que aumenta la nafta, necesitamos trasladar a precios para no perder. Y para conservar muchos productos, utilizamos heladeras casi todo el día; si aumenta la tarifa de luz nos impacta directamente”, señala Rabaski. Otro caso es la carne y los productos lácteos, en los que inclinando la balanza del precio final de los insumos necesarios para mantener a los animales.

En junio, la Asociación Civil Ferias Francas de Posadas realizó su asamblea general ordinaria 2024, que incluyó la elección de una nueva comisión directiva. Por primera vez, una mujer presidirá la Asociación. Se trata de Malena Ruiz Díaz, quien tras ser electa con 127 votos reemplazará a José Villasanti y ejercerá el cargo durante los próximos tres años.

“Hace 15 años vengo trabajando en la parte administrativa de la Asociación. Ser presidenta me va a permitir defender ideas y presentar proyectos que vengo elaborando para mejorar aspectos de las ferias. Hay mucho por mejorar y seguramente los cambios se irán reflejando”, asegura Ruiz Díaz. Entre esos desafíos aparecen la producción agroecológica plena, la innovación tecnológica, las mejoras en la presentación de los productos y el fortalecimiento de la red de consumidores.  

Salvador Torres es secretario general del Movimiento Agrario Misionero (MAM), organización fundadora de las Ferias Francas en la provincia. Destaca la conveniencia en precios para el consumidor citadino que ofrecen las ferias, pero al mismo tiempo advierte acerca de determinadas políticas públicas de nivel nacional, que tendrán un impacto directo en el sector que las nutre: los productores familiares.

“El cierre del Instituto Nacional de la Agricultura Familiar, Campesina e Indígena (Inafci) representa un golpe muy duro para el sector. Gracias a ese organismo logramos avances muy importantes. El proceso de las Ferias Francas fue impulsado, en su momento, por el Programa Nacional de Agricultores Familiares, que ahora queda desarticulado", explica Torres sobre las históricas iniciativas que contenía el Inafci.

"Esas políticas fueron importantes para imponer otra mirada de la agricultura, basada en la agroecología, en la venta del productor al consumidor, incluso en la conformación de cooperativas. Es realmente preocupante y, por eso, estamos en estado de alerta y movilización por esta y otras medidas del gobierno nacional, sumamente perjudiciales para la agricultura familiar”, advierte el dirigente del MAM.

Fuente: Tierra Viva Agencia de Noticias

Temas: Agricultura campesina y prácticas tradicionales

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