El próximo Consejo Europeo decidirá sobre las moratorias nacionales de transgénicos

Idioma Español
País Europa

La Comisión Europea pretende que el Consejo de Ministros de Medio Ambiente de la Unión Europea (UE) del próximo 24 de junio ponga fin a las moratorias nacionales sobre cultivos y alimentos transgénicos que mantienen varios países miembros. Envía cartas a las Ministras de Agricultura y Medio Ambiente diciendo NO al fin de la moratoria

Esta decisión tiene gran trascendencia, pudiendo cercenar la capacidad de los gobiernos de tomar medidas precautorias para la protección del medio ambiente, la salud pública y la alimentación.

A lo largo de los últimos años Alemania, Austria, Francia, Grecia y Luxemburgo han prohibido la comercialización y el cultivo de organismos manipulados genéticamente (OMG) autorizados por la Unión Europea, acogiéndose a las cláusulas de salvaguardia de la legislación europea que permiten su prohibición cuando un país considera que presentan riesgos para la salud pública o para el medio ambiente.

Los riesgos sanitarios, ambientales y socioeconómicos asociados a una mayoría de los productos transgénicos autorizados en la UE no han sido estudiados adecuadamente antes de su autorización, ni se ha hecho un seguimiento riguroso de sus efectos, dado que la normativa vigente hasta 2003 no requería una evaluación del impacto de los OMG rigurosa y a largo plazo. De hecho, es preceptiva una revisión de dichas autorizaciones en el año 2006. Por otra parte, en su documento de defensa de la moratoria europea ante la Organización Mundial del Comercio (OMC), la propia Comisión reconoce que el proceso de creación de OMG está rodeado de incertidumbres, siendo muy limitado y objeto de considerable debate el conocimiento científico relacionado con sus repercusiones.

La Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), de la que España es miembro, aprobó en Noviembre 2004 una resolución en la que se pedía una moratoria a la liberación de OMG en tanto no se demuestre su seguridad para la biodiversidad y la salud humana y animal.

La insistencia de la Comisión Europea en reclamar el fin de las prohibiciones nacionales sólo se puede entender, por tanto, por las presiones ejercidas por Estados Unidos ante la OMC para forzar la entrada de alimentos transgénicos en la Unión Europea. No es aceptable, sin embargo, que intereses económicos y consideraciones de libre mercado prevalezcan sobre el derecho de los países a decidir en temas tan fundamentales para la sociedad como son la producción de alimentos, la protección del medio ambiente y la salud de sus ciudadanos.

Por todo ello, Ecologistas en Acción ha solicitado al Gobierno Español el voto en contra de la propuesta de la Comisión, que pudiera ser decisivo. En su escrito al Gobierno pide asimismo la revocación en España de las autorizaciones de cultivo de variedades transgénicas, prohibidas en otros países europeos, y cuya retirada del mercado se viene reclamando desde 1998.

ECOLOGISTAS EN ACCIÓN
E-mail: gro.noiccanesatsigoloce@noicacinumoc
Página Web: www.ecologistasenaccion.org

MODELO CARTA Ministra de Agricultura

Excma. Sra. Dña. Elena Espinosa
Ministra de Agricultura, Pesca y Alimentación
Paseo Infanta Isabel 1
28071 MADRID
Fax. 91 347 51 42

Ref.: votación en el Consejo de Medio Ambiente de la Unión Europea sobre las prohibiciones de varios países miembros sobre determinados cultivos y alimentos modificados genéticamente.

Estimada Sra.

El Consejo de Ministros de Medio Ambiente de la Unión Europea (UE) del próximo 24 de junio tendrá que decidir sobre una propuesta de la Comisión Europea de poner fin a las prohibiciones nacionales sobre cultivos y alimentos transgénicos que mantienen varios países miembros. Esta decisión tiene una enorme trascendencia, tanto por sus repercusiones a nivel ambiental, sanitario y agrícola en dichos países como porque una votación favorable a dicha propuesta constituiría un precedente de enorme gravedad en el proceso de decisión europeo.

Las prohibiciones de organismos modificados genéticamente (OMG) en Alemania, Austria, Francia, Grecia y Luxemburgo responden a una legítima preocupación por la protección de la salud, el medio ambiente y el futuro de la agricultura por parte de los gobiernos de estos países, que se han acogido a las cláusulas de salvaguardia der la legislación europea sobre liberación de OMG (Art. 16 de la Directiva 90/220/CEE y Art. 23 de la Directiva 2001/18CE).

Como la propia Comisión Europea reconoce en su documento de defensa de la moratoria de la UE ante la Organización Mundial del Comercio, el proceso de creación de OMGs está rodeado de incertidumbres y la naturaleza de los riesgos asociados a la manipulación genética no es igual a la de los riesgos asociados a plantas mejoradas por métodos tradicionales, siendo muy limitado y objeto de considerable debate el conocimiento científico relacionado con sus repercusiones. La Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), de la que España es miembro, aprobó en Noviembre 2004 una resolución en la que se pedía una moratoria a la liberación de OMG en tanto no se demuestre su seguridad para la biodiversidad y la salud humana y animal más allá de la duda razonable.

Por otra parte, dado que la Directiva 90/220 vigente hasta 2003 no requería una evaluación del impacto de los OMG a largo plazo, los riesgos sanitarios, ambientales y socioeconómicos asociados a una mayoría de los productos transgénicos autorizados en la UE no han sido estudiados adecuadamente antes de su autorización, ni se ha hecho un seguimiento riguroso de sus efectos. De hecho, según la nueva normativa es preceptiva una revisión de dichas autorizaciones en el año 2006. Tanto el Parlamento Europeo como los gobiernos de algunos países consideran, además, que la moratoria europea no debiera haberse levantado sin contar con normas sobre responsabilidad por daños y de medidas de coexistencia comunes.

La insistencia de la Comisión Europea en reclamar el fin de las prohibiciones nacionales sólo se puede entender, por tanto, por las presiones ejercidas por Estados Unidos ante la Organización Mundial del Comercio para forzar la entrada de alimentos transgénicos en la Unión Europea. No es aceptable, sin embargo, que intereses económicos y consideraciones de libre mercado prevalezcan sobre el derecho de los países a decidir en temas tan fundamentales para la sociedad como son la producción de alimentos, la protección del medio ambiente y la salud de sus ciudadanos.

Por todo ello, Ecologistas en Acción solicita el voto en contra del Gobierno Español a la propuesta de la Comisión Europea en el próximo Consejo de Ministros, modificando la postura de abstención mantenida en las últimas votaciones, que ha supuesto un significativo distanciamiento de la posición del anterior gobierno, aunque insuficiente a nuestro entender dado los riesgos y la imposibilidad de control de los OMG una vez liberados en el medio. El voto español en este caso pudiera ser crucial para decidir sobre una propuesta que pone en peligro el derecho soberano de los gobiernos europeos a ejercer el principio de precaución en defensa del medio ambiente, de la salud pública y de la sostenibilidad agraria nacional.

Reiteramos asimismo nuestra solicitud de revocación en España de las autorizaciones de cultivo de variedades transgénicas, prohibidas en varios países de la Unión Europea y que Ecologistas en Acción viene reclamando desde 1998.

Quedamos a su disposición para cualquier aclaración o duda al respecto.

Atentamente,

MODELO CARTA Ministra Medio Ambiente

Excma. Sra. Dña. Cristina Narbona
Ministra de Medio Ambiente
Plaza de San Juan de la Cruz s/n
28071 MADRID
Fax. 91 597 67 09

Ref.: votación en el Consejo de Medio Ambiente de la Unión Europea sobre las prohibiciones de varios países miembros sobre determinados cultivos y alimentos modificados genéticamente.

Estimada Sra.

El Consejo de Ministros de Medio Ambiente de la Unión Europea (UE) del próximo 24 de junio tendrá que decidir sobre una propuesta de la Comisión Europea de poner fin a las prohibiciones nacionales sobre cultivos y alimentos transgénicos que mantienen varios países miembros. Esta decisión tiene una enorme trascendencia, tanto por sus repercusiones a nivel ambiental y sanitario en dichos países como porque una votación favorable a dicha propuesta constituiría un precedente de enorme gravedad en el proceso de decisión europeo.

Las prohibiciones de organismos modificados genéticamente (OMG) en Alemania, Austria, Francia, Grecia y Luxemburgo responden a una legítima preocupación por la protección de la salud y el medio ambiente por parte de los gobiernos de estos países, que se han acogido a las cláusulas de salvaguardia de la legislación europea sobre liberación de OMG (Art. 16 de la Directiva 90/220/CEE y Art. 23 de la Directiva 2001/18CE).

Como la propia Comisión Europea reconoce en su documento de defensa de la moratoria de la UE ante la Organización Mundial del Comercio, el proceso de creación de OMGs está rodeado de incertidumbres y la naturaleza de los riesgos asociados a la manipulación genética no es igual a la de los riesgos asociados a plantas mejoradas por métodos tradicionales, siendo muy limitado y objeto de considerable debate el conocimiento científico relacionado con sus repercusiones. La Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), de la que España es miembro, aprobó en Noviembre 2004 una resolución en la que se pedía una moratoria a la liberación de OMG en tanto no se demuestre su seguridad para la biodiversidad y la salud humana y animal más allá de la duda razonable.

Por otra parte, dado que la Directiva 90/220 vigente hasta 2003 no requería una evaluación del impacto de los OMG a largo plazo, los riesgos sanitarios y ambientales asociados a una mayoría de los productos transgénicos autorizados en la UE no han sido estudiados adecuadamente antes de su autorización, ni se ha hecho un seguimiento riguroso de sus efectos. De hecho, según la nueva normativa es preceptiva una revisión de dichas autorizaciones en el año 2006. Tanto el Parlamento Europeo como los gobiernos de algunos países consideran, además, que la moratoria europea no debiera haberse levantado sin contar con normas sobre responsabilidad por daños y de medidas de coexistencia comunes.

La insistencia de la Comisión Europea en reclamar el fin de las prohibiciones nacionales sólo se puede entender, por tanto, por las presiones ejercidas por Estados Unidos ante la Organización Mundial del Comercio para forzar la entrada de alimentos transgénicos en la Unión Europea. No es aceptable, sin embargo, que intereses económicos y consideraciones de libre mercado prevalezcan sobre el derecho de los países a la protección del medio ambiente y la salud de sus ciudadanos.

Por todo ello, Ecologistas en Acción insta al Gobierno Español a votar en contra de la propuesta de la Comisión Europea en el próximo Consejo de Ministros, modificando la postura de abstención mantenida en las últimas votaciones, que supone un significativo distanciamiento de la posición del anterior gobierno, aunque insuficiente a nuestro entender, dado los riesgos y la imposibilidad de control de los OMG una vez liberados en el medio. El voto español en este caso pudiera ser crucial para decidir sobre una propuesta que pone en peligro el derecho soberano de los gobiernos europeos a ejercer el principio de precaución en defensa del medio ambiente y de la salud pública nacional.

Reiteramos asimismo nuestra solicitud de revocación en España de las autorizaciones de cultivo de variedades transgénicas, prohibidas en varios países de la Unión Europea y que Ecologistas en Acción viene reclamando desde 1998.

Quedamos a su disposición para cualquier aclaración o duda al respecto.

Atentamente,

ECOLOGISTAS EN ACCIÓN
E-mail: gro.noiccanesatsigoloce@noicacinumoc
Página Web: www.ecologistasenaccion.org

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