El proyecto Gorrión de Ixtacamaxtitlán es ilegal, claman pobladores ante la Semarnat
“¡Daremos la vida, con nuestra sangre defenderemos el territorio de los proyectos de muerte: Víctor Manuel Toledo Mancos , titular de la Semarnat, tú tienes ahora la última palabra!”, fue el ultimátum que gritaron ciudadanos a las autoridades ambientales durante la clausura simbólica de la delegación realizada este lunes y a menos de un mes para que sea expedida la autorización a la Minera Gorrión SA de CV para la instalación de la mina a cielo abierto en Ixtacamaxtitlán.
Ilegal, el proyecto Gorrión de Ixtacamaxtitlán, claman pobladores ante la Semarnat
Luego de un mitin informativo en el zócalo sobre las violaciones de las empresas mineras, integrantes de la Unión de Ejidos y Comunidades en defensa de la tierra, el agua y la vida Atcolhua, del municipio de Ixtacamaxtitlán, así como habitantes que representaban a más de 80 comunidades que viven a lo largo del río Apulco en la sierra norte de Puebla, organizaciones civiles y colectivos promotores de la salud, el medio ambiente, la gestión ciudadana del agua y los derechos humanos en el estado, la Unión Popular de Vendedores Ambulantes UPVA 28 de Octubre realizaron un plantón frente a la delegación en Puebla de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) para exigir la no autorización de la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA) presentada por la empresa minera en febrero de este año.
Lucía Hernández, habitante de Ixtacamaxtitlán leyó el pronunciamiento dirigido al secretario Víctor Manuel Toledo Mancos en el que exhibió las ilegalidades, omisiones irregularidades, información falsa de la MIA del proyecto Ixtaca, ingresada para su evaluación a Semarnat el pasado mes de febrero por la filial de la canadiense Almaden Minerals.
“Este proyecto traería como consecuencia un proceso de devastación ambiental por los daños irreversibles a la biodiversidad, al equilibrio ecológico y al suministro de agua en la Sierra Norte de Puebla, poniendo en riesgo la vida de miles de familias campesinas–indígenas. La propia minera reconoce que los impactos del proyecto serían irreversibles y que hay riesgo para los factores que componen el ecosistema por lo que no se pueden aceptar medidas de mitigación que comprometen el futuro de nuestros pueblos”, asentó.
Lucía Hernández sostuvo que el análisis de la MIA realizado por diversos especialistas, en diferentes áreas del conocimiento, presentaron observaciones técnicas presentada por Minera Gorrión, sustentando la inviabilidad del proyecto por las graves e irreversibles consecuencias que tendría, como los impactos irreversibles causados en el sistema hidrológico, la biodiversidad y la vocación de uso de suelo agroforestal pueden generar un efecto cascada que afectaría el ecosistema de la región, más allá del municipio de Ixtacamaxtitlán. “ No toma en cuenta los impactos socioeconómicos del cambio de uso de suelo de terrenos agrícolas y omite información sobre especies que se verían afectadas dentro de la NOM–059, pues afirma que ninguna es endémica de la zona lo cual es falso”.
Además de las razones ambientales, pobladores insistieron en que si la Semarnat autoriza la MIA solo profundizará la violencia que la minera ha generado, pues se ha aliado con actores del viejo régimen en el estado de Puebla, acostumbrados a imponer, corromper y abusar del poder.
En el pronunciamiento se denunció también que empleados y empresas que ahora trabajan con las mineras, fueron servidores públicos, funcionarios que trabajan para el mejor postor. “Sabemos que hay profesionistas sin ética, que se venden para hacer los estudios a las empresas extractivas como GMI Consulting y Corporación Ambiental de México SA de CV, consultora al servicio de minera Frisco en el proyecto Espejeras que pretendía explotar minerales en Tetela de Ocampo, así como también del proyecto minero Caballo Blanco de Almaden Minerals y ahora en el proyecto Ixtaca de la misma empresa”.
“Urge poner en práctica nuevas formas de gobernar, urge que los discursos se conviertan en hechos. Urge evitar más desgracias provocadas por las empresas mineras”, sostuvieron pobladores en el discurso público dirigido al secretario del medio ambiente, que fue escuchado por la encargada de despacho y otros funcionarios, que tiesos, atendieron las quejas.
Media decena de pobladores tomaron la palabra y recriminaron la condición de “empleados de las trasnacionales” “¿por qué no trabajan a favor del medio ambiente?, son unos cínicos, saben cuántos árboles ha derribado la minera?, inquirió un poblador.
–No, respondieron todos los funcionarios.
—¿Saben cuáles han sido todas las afectaciones en la fase de exploración?
–No. Volvieron a contestar.
“Qué van a saber… si ustedes no saben ni llegar hasta allá. Ni idea tienen del desprecio a nuestros derechos, a nuestra cultura, a nuestra historia y a quien desde luego no le importa nuestro futuro, pero ustedes no saben que se están jugando también su futuro al autorizar una destrucción de tal magnitud”, dijo un poblador en el que increpó a los funcionarios.
“Nos parece absurdo que la Semarnat se ha atrevido a realizar el proyecto de evaluación sabiendo que que minera Gorrión no cuenta con derechos sobre las concesiones mineras que dice tener, las cuales han sido declaradas inexistentes e ilegales en el proceso de juicio de amparo interpuesto en defensa de nuestros derechos a la tierra, al territorio y a la libre determinación”, señaló la académica Silvia Villaseñor, integrante del Consejo integrante del Consejo Tillac Tlalic.
Fuente: La Jornada de Oriente