Ecuador: "Sin manglares no hay patria"
Los pueblos ancestrales del ecosistema manglar del Ecuador estarán presentes durante la inauguración de la asamblea nacional constituyente, para demandar a los asambleístas el reconocimiento de sus territorios y la recuperación del ecosistema manglar ocupado ilegalmente por la industria camaronera
C-CONDEM
Boletín de Prensa
Quito, 28 de noviembre 2007 - 23h00
Más de 100 delegados de las organizaciones de la Coordinadora Nacional para la Defensa del Ecosistema Manglar del Ecuador (C-CONDEM) de Esmeraldas, Manabí, Guayas, Santa Elena y El Oro se harán presentes en la ciudad de Montecristi, provincia de Manabí para presentar la propuesta de los Pueblos Ancestrales del Ecosistema Manglar a la Asamblea Nacional Constituyente, la propuesta se enfoca en el reconocimiento de sus territorios y la garantía del derecho al trabajo y a la soberanía alimentaria.
El texto de la propuesta, preparada para la nueva Constitución, en su parte medular dice: El Estado recuperará el territorio ocupado de manera ilegal por industrias extractivas y que ha sido manejado ancestralmente por pueblos, nacionalidades y comunidades ancestrales. El Estado reconoce los derechos de los pueblos y nacionalidades al acceso, administración, control y manejo de forma comunitaria del territorio que habitan ancestralmente y de su patrimonio natural, incluyendo el de áreas naturales protegidas.
El texto propone reforzar el derecho de las comunidades, que van a ser afectadas por actividades extractivas, a la consulta previa Informada, con la obligatoriedad del pleno consentimiento y el derecho al veto.
El ecosistema de manglar en el Ecuador ha sido devastado en un 70% en los últimos 40 años, principalmente por causa de la industria de producción de camarón (acuacultura industrial de camarón) que ha talado indiscriminadamente el bosque, se ha apropiado ilegalmente de tierras que son Bienes Nacionales de Uso Público y Patrimonio Forestal del Estado - ha contaminado sus aguas, pero sobre todo ha impactado negativamente sobre la calidad de vida de los pueblos que ancestralmente se han articulado al ecosistema manglar; datos últimos del SIISE dan cuenta que los niveles de pobreza por necesidades básicas insatisfechas de las comunidades de pescadores y recolectores artesanales de las zonas costeras, donde se ha desarrollado la acuacultura industrial del camarón, son aún peores que el promedio nacional, a pesar de que la industria ostenta los primeros lugares de ingreso de divisas por exportaciones.
En la ciudad de Montecristi, los Pueblos Ancestrales del Ecosistema Manglar se darán cita para dejar expresada su presencia de lucha y resistencia frente al modelo capitalista de extracción de los recursos naturales que atenta contra la sobrevivencia de la humanidad entera. Se autoconvocan para compartir con otras organizaciones sociales y populares la esperanza de un país libre, justo y solidario.
Más información:
Verónica Yépez, Comunicaciones C-CONDEM en Quito al 25 22 714 – ce.gro.mednocc@yorev
En Montecristi, con Líder Góngora F., Presidente C-CONDEM , al 09 4893 495
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PROPUESTA PARA LA NUEVA CONSTITUCIÓN
El modelo económico debe ser justo y equitativo, basado esencialmente en la recuperación y conservación de los ecosistemas que garantice el trabajo, cultura, la calidad de vida y la soberanía alimentaria de los ecuatorianos.
La economía del Estado se organizará en función del interés nacional y bajo los principios de equidad, diversidad, sustentabilidad y soberanía privilegiando las economías de pequeña escala, revalorizando el rol de las mujeres, los principios de comunidad y solidaridad, fortaleciendo el tejido y organización de este sector y las relaciones de intercambio justo. En ningún caso soslayando los derechos humanos y el interés colectivo.
Se promoverá y protegerá la producción local de alimentos para el mercado interno, regulando la importación de los mismos, así como el consumo de la producción local y tecnologías que no generen dependencias.
La tierra y el patrimonio natural tienen una función social. Su uso, acceso y manejo debe darse en función de garantizar la soberanía alimentaria, el bienestar de las comunidades rurales y urbanas y la conservación del patrimonio natural, agua, suelo y biodiversidad. Se prohíbe la venta de tierras a intereses transnacionales y el tráfico de tierras agrícolas y del patrimonio forestal del Estado.
El Estado recuperará el territorio ocupado hoy de manera ilegal por industrias extractivas y que ha sido manejado ancestralmente por pueblos, nacionalidades y comunidades ancestrales.
El Estado reconoce los derechos de los pueblos y nacionalidades al acceso, administración, control y manejo de forma comunitaria del territorio que habitan ancestralmente y de su patrimonio natural, incluyendo el de las áreas naturales protegidas.
El derecho a la Consulta Previa Informada, sobre la base de una información oportuna, veraz, en lengua materna a los directa e indirectamente afectados. Sin perjuicio de la consulta, es obligatorio el consentimiento de los directamente o indirectamente afectados para la adopción de estas decisiones. Estableciéndose el derecho al veto, en los siguientes casos:
Si se refiere a conocimientos tradicionales o afectaciones a tierras de pueblos y nacionalidades ancestrales;
Si las actividades productivas, extractivas y de infraestructura y servicios, por sus dimensiones modifican o ponen en riesgo la estabilidad de los ecosistemas.
Si las decisión afecte de manera inminente la calidad de vida, soberanía alimentaria o subsistencia de una comunidad o colectivo.
Si involucra desplazamiento o desestructuración de las formas de organización comunitarias y colectivas
En los demás casos reconocidos por instrumentos internacionales sobre derechos humanos.
Quito, 8 de Noviembre del 2007
“Por los Derechos de los Pueblos Ancestrales del Ecosistema Manglar: Territorio, Trabajo y Soberanía Alimentaria”
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