Consagra nueva Constitución ecuatoriana derechos de la naturaleza
Los derechos de la naturaleza quedaron consagrados en la nueva Constitución aprobada este domingo por los electores ecuatorianos durante la consulta popular donde triunfó la opción del “Sí” a ese texto. “La naturaleza o Pachamama, donde se reproduce y realiza la vida, tiene derecho a que se respete integralmente su existencia y al mantenimiento y regeneración de sus ciclos vitales”, estipula el artículo 71 de la nueva Carta Magna.
La Carta Magna, aprobada por la Asamblea Constituyente en julio pasado y puesta a consideración de la ciudadanía en las urnas este domingo, cuando ganó la opción “Sí”, contiene cuatro artículos dedicados al tema ecológico, en un capítulo exclusivo.
“La naturaleza tiene derecho a la restauración”, la que “será independiente de la obligación que tiene el Estado y las personas de indemnizar a los individuos o colectivos que dependan de los sistemas naturales afectados”, señala el artículo 72.
Organizaciones ecologistas y ambientalistas, que trabajaron de manera intensa para que la Asamblea Constituyente incluyera ese capítulo, destacaron que ese texto no tiene antecedentes en ningún país del mundo.
Afirmaron que el texto resume un intenso debate, de manera particular en Europa y Estados Unidos, sobre la necesidad de conservar la naturaleza ahora que está expuesta a intenso riesgo por los patrones de desarrollo vigentes en el mundo.
En el caso de Ecuador, el debate penetró de manera fuerte en algunos foros con el estímulo de activas organizaciones ambientalistas, dado que es uno de los países de más rica biodiversidad en el mundo y con el antecedente de derrames de petróleo que la Amazonia.
Expertos sostuvieron que es imposible conceptuar a la naturaleza como un sujeto jurídico, mientras organizaciones vinculadas con la producción agropecuaria a?rmaron que la medida impone barreras a la actividad de ese sector.
Las organizaciones ambientalistas señalaron al respecto que la nueva ley fundamental de Ecuador señala que “toda persona, comunidad; pueblo o nacionalidad podrá exigir a la autoridad pública el cumplimiento de los derechos de la naturaleza”.
La nueva Carta también refleja la polémica que desatan los recurrentes derrames de petróleo en la Amazonia.
Al respecto, estipula que en los casos de impacto ambiental grave o permanente, incluidos los ocasionados por la explotación de recursos naturales no renovables, el Estado establecerá los mecanismos más e?caces” para restaurar o mitigar las consecuencias ambientales.
Fuente: El Sendero del Peje