Colombia: militares y paramilitares vuelven a amenazar con violencia a comunidades indígenas
El grupo paramilitar Águilas Negras volvió a esparcir amenazas en Colombia. Esta vez los blancos son las comunidades negras, campesinas, indígenas e integrantes de ONGs que actúan en defensa de los derechos humanos en el departamento Valle del Cauca, sectores de Dagua y Buenaventura. En el panfleto que contiene las amenazas, el grupo paramilitar deja claro que la sentencia se cumpliría en los próximos días.
Según la Comisión Intereclesial de Justicia y Paz las amenazas están siendo realizadas en todas las calles y barrios de Buenaventura. Los paramilitares desprecian el trabajo del movimiento social y de derechos humanos y lo asocian con el desorden social.
Ante esta grave crisis de derechos humanos y de carácter humanitario que la región de Buenaventura enfrenta desde el año 2000, la Comisión Intereclesial pide a las autoridades medidas que vayan más allá de las respuestas represivas, pero sin que puedan provocar un desmonte institucional de la mentalidad y de la lógica paramilitar; la intervención ante la complicidad con operaciones delictivas de autoridades civiles; la centralización de la investigación judicial en Bogotá; y el fin de las actividades empresariales privadas que no respetan los derechos de las comunidades y están promoviendo violaciones de derechos humanos y ambientales.
En el municipio de Villagarzón, en el departamento colombiano de Putumayo, las amenazas e intimidaciones están llegando de los militares de la Brigada Móvil 13. Las víctimas son los indígenas Nasa, que están siendo perseguidos por resistirse a la militarización del Resguardo Nasa Jerusalén San Luis Alto Picudito.
Los militares exigen el fin de la movilización indígena que estaba siendo realizada por las autoridades Nasa y el retiro de todos los que viven en el territorio. Aún con la resistencia de la comunidad indígena, hace ocho días, el Resguardo Nasa Jerusalén San Luis Alto Picudito fue ocupado y militarizado por más de 200 soldados de la Brigada Móvil 13, vinculada a la 4ª División del Ejército. Desde entonces, los militares están acampados al lado de las casas de la comunidad Nasa.
La guardia indígena hizo un intento de pedir el retiro pacífico de los soldados, que se comprometieron a salir, pero que luego no cumplieron el acuerdo.
Traducción: Daniel Barrantes - moc.liamg@leinad.setnarrab
Fuente: Adital