Campesinos arman frente contra la Ley Federal de Variedades Vegetales
Ante la propuesta de reforma a la Ley Federal de Variedades Vegetales, que según colectivos de defensa de las semillas plantea multas, cárcel e incluso quemas de las cosechas si los campesinos intercambian libremente semillas, han abierto un frente opositor, pues además aseguran, se abre el camino a la siembra de semillas transgénicas que en la zona sur del estado ya se ha documentado como una realidad.
Edición: Elsa Torres
A través de la plataforma usa tu poder, la campaña Sin maíz no hay país promueve la petición dirigida hacia los integrantes de la Cámara de Diputados a rechazar esta reforma, asegurando que la riqueza natural del país está amenazada por las grandes empresas que buscan adueñarse de las principales semillas del mundo, las mejores tierras y agua.
“Estas empresas, apoyadas por legisladores y funcionarios desinformados de la riqueza de este patrimonio, han diseñado una propuesta de reforma a la Ley Federal de Variedades Vegetales (LFVV)”, acusan.
Aseguran que esta propuesta presentada en marzo pasado ante comisiones de la Cámara de Diputados por el legislador de Morena y presidente de la Comisión de Desarrollo y Conservación Rural, Agrícola y Autosuficiencia Alimentaria, Eraclio Rodríguez Gómez, considera “costosas multas, penas de cárcel, e incluso la quema de las cosechas, si los campesinos y campesinas intercambian libremente las semillas, las pencas de nopal, los esquejes de plantas que han heredado y diversificado por milenios”.
Afirman que sumado a ello, las transnacionales podrían tener los derechos de propiedad intelectual de las semillas y otras partes de las plantas, privatización que dicen “abre, además, la puerta a la siembra de semillas transgénicas”.
La campaña hace un llamado a las organizaciones y colectivos de agricultores, campesinos, de pueblos y comunidades indígenas, que se verían afectados, así como a los fitomejoradores a movilizarse e impedir que se apruebe en la Cámara de Diputados el proyecto de reformas a la Ley que data desde 1996 y en la que se reconoce el intercambio libre de semillas tan esencial para la protección de la riqueza biocultural y la soberanía alimentaria de nuestro país.
“Demandamos de manera enérgica a las y los integrantes de la actual legislatura de la Cámara de Diputados no aprobar esta iniciativa de reforma de Ley que traería afectaciones sociales y ambientales irreparables, y que violaría los derechos de toda la población mexicana”, cita la petición.
Fuente: La Jornada Maya